Las universidades crean un programa de intercambio de estudiantes entre centros

Las universidades han elaborado un programa de intercambio de estudiantes entre las universidades españolas, similar al programa europeo Erasmus, adelantándose al Gobierno, que lleva meses anunciando su propósito de crearlo. A partir del próximo año, alrededor de 150.000 alumnos podrán estudiar un curso o un semestre de su carrera en una universidad española diferente a la suya, siempre que hayan aprobado el primer curso.

, Los rectores esperan que este programa, que se denominará Sistema de Intercambio entre Centros Universitarios de España (SICUE), empiece a funcionar en el segundo semestre del próximo curso, para dedicar el primero a establecer los acuerdos entre las universidades que quieran participar en él, llegar a acuerdos de funcionamiento y convalidaciones de asignaturas entre universidades y divulgar la oferta entre los estudiantes. Los créditos que cursen los alumnos en otra universidad serán convalidados automáticamente, pero no podrán cursar en el centro que visiten ese año materias que ya hayan suspendido en su centro de origen. La selección de los candidatos se hará por su expediente académico y por las posibilidades académicas del estudiante para adaptarse al plan de la universidad de destino. Esta selección se hará tras realizar un análisis individualizado de las peticiones de los alumnos a cargo de una comisión específica que creará cada universidad participante. El proyecto fue presentado ayer en Castellón por el rector de la Universidad Jaume I, Fernando Romero, que preside la Red Universitaria de Asuntos Estudiantiles de la Conferencia de Rectores de las Universidades Españolas (CRUE). Los responsables de las universidades llevan varios años insistiendo en la necesidad de potenciar la movilidad de los estudiantes entre las universidades españolas, y los vicerrectores ya propusieron hace dos años en una reunión celebrada en Badajoz crear un programa de movilidad de alumnos similar al Erasmus.

Escasa movilidad

Según Romero, uno de los objetivos de este plan es paliar la escasa movilidad de alumnos que hay en la actualidad, ya que son muy pocos los que se acogen a las plazas del distrito compartido para cursar toda la carrera en una universidad de otro distrito, entre otras razones por la escasez de becas. Romero dice que, con este programa, se ha querido "dejar elaborada la parte académica, dando a las administraciones el marco que se deberá financiar". El apoyo económico a los alumnos será a base de becas que deberán financiar las administraciones y el Gobierno. Según el rector de la Universidad Jaume I, sería necesario establecer dos tipos de becas. Por una parte, se crearían unas becas de compensación, similares a la que se conceden a los becarios del programa Erasmus: estarían destinadas a ayudar a los alumnos a costear el desplazamiento y su estancia en otra localidad, ascenderían a unas 50.000 pesetas mensuales y a ellas podría optar cualquier estudiante, con independencia de su renta. También se establecerían becas de más cuantía para posibilitar que los alumnos sin recursos económicos pudieran tener la oportunidad de acogerse al programa. El ministro de Educación, Mariano Rajoy, ha manifestado en reiteradas ocasiones su intención de facilitar esta movilidad. Una vez que se transfiera la gestión de las becas universitarias a las comunidades -anunciada por el Ministerio de Educación para el próximo mes de julio-, el Gobierno sólo seguirá siendo responsable precisamente de gestionar las becas "no territorializables", las de movilidad de estudiantes entre comunidades, de las cuales debería destinar una cuantía para financiar el SICUE.