Un centro de salud lleva dos meses sin uso por un enfrentamiento político
El edificio del segundo centro de salud de Torremolinos lleva terminado dos meses pero no se abre, pese a que el único ambulatorio con que cuenta la localidad está absolutamente masificado. Los 37.235 habitantes empadronados en el municipio siguen esperando que se cumpla uno de los proyectos más demandados, mientras el Ayuntamiento (PP) y la delegación de Salud (PSOE) continúan enzarzados en una agria polémica que comenzó a principios de abril, cuando se inauguró el edificio.
Para hacer realidad la iniciativa, la Diputación aportó 115 millones de pesetas y el consistorio puso el suelo. El convenio firmado hace dos años reservó a la Consejería de Salud la obligación de dotar al centro de personal y equipamiento. El pasado 6 de abril, ya en precampaña, la Diputación y el Ayuntamiento -instituciones gobernadas por el PP- decidieron inaugurar el edificio sin cursar invitación a las autoridades sanitarias. Desde entonces, los populares han echado reiteradamente la culpa a Salud de que el centro permanezca sin uso. El delegado de la Consejería, José Luis Marcos, reiteró ayer que el ayuntamiento no ha cumplido los trámites para que los técnicos de Salud visen las obras ni ha hecho la preceptiva cesión por acuerdo de pleno al Servicio Andaluz de Salud. "Pedro Fernández [el alcalde] ha engañado miserablemente a los ciudadanos culpando al SAS; la obra ni siquiera ha sido recepcionada por los técnicos del Ayuntamiento", protestó Marcos. El alcalde ha repetido en varias ocasiones que ha "puesto en bandeja al SAS" un edificio para que cumpla su obligación de mejorar la atención sanitaria a los torremolinenses. La delegación de Salud tiene el mobiliario y la plantilla preparados para poner en marcha el centro una semana después de que el ayuntamiento ceda el edificio. En plena campaña, las autoridades sanitarias dudan de que el PP vaya a cumplir los trámites para que el SAS se apunte el tanto de abrir uno de los centros de salud más esperados de la provincia. El ambulatorio actual está sobresaturado porque fue diseñado de acuerdo a la población de derecho -más de 37.000 personas- cuando los habitantes de hecho doblan esa cifra e incluso en verano se disparan hasta casi los 200.000. La saturación del ambulatorio ha motivado reiteradas quejas de la Unión de Consumidores a la delegación de Salud y varias concentraciones del personal sanitario, que atribuyó a la sobrecarga asistencial las agresiones sufridas por varios médicos. Crisis en el Clínico Por su parte, en el hospital Clínico las aguas siguen revueltas. Ayer, el gerente; Diego Pedrosa, cesó a un subdirector de enfermería, minutos después de que los trabajadores le ratificaran su apoyo. En respaldo a Miguel Morales, hoy harán efectiva su dimisión el director de enfermería y el otro subdirector del servicio. Estas renuncias se producen cinco días después de que dimitiera el director médico, Francisco Fortes, por discrepancias con Pedrosa. La caja de los truenos se ha destapado en el hospital malagueño. En menos de una semana se ha conocido la supuesta contratación irregular de la mujer de un directivo del SAS, una lista de espera de enfermos oncológicos de tres meses y que la gerencia mantiene contratado a José Villalobos, hermano de la alcaldesa, pese a que la plaza que ocupa debería haberse amortizado en 1996. El CSIF volvió a pedir ayer la dimisión de Pedrosa y, con el Sindicato de Enfermería, puso en la diana de sus críticas a la gerente del SAS, Carmen Martínez Aguayo. "Dado que es imposible que Pedrosa dimita, tendrá que responder quien lo ha puesto", exigió Jesús Calle, de CSIF, en alusión a Aguayo. Desde la Consejería se intentó quitar hierro a la polvareda que se ha levantado en el hospital. El consejero, Luis García de Arboleya, aseguró ayer que Villalobos está contratado "legalmente, de acuerdo con la normativa vigente". El delegado de Salud minimizó la denuncia de un grupo de facultativos sobre una lista de espera de enfermos de cáncer. Según Marcos, esa denuncia no ha llegado a la delegación: "Que se denuncie y se demuestre", dijo.
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