Repsol acumula una subida de casi un 15% desde que se conoció su oferta sobre YPF

La cotización de Repsol se disparó ayer y subió el 9,48% en la Bolsa española, con una contratación de más de 15 millones de acciones (40.000 millones de pesetas), como respuesta a la OPA anunciada el pasado jueves sobre la argentina YPF, que puede meter a Repsol entre las 10 primeras empresas petroleras del mundo. Desde que se anunció la operación, la cotización de Repsol ha subido el 14,85% y sale de la zona negativa en que se había mantenido. El consejo de YPF, reunido anoche, retrasó hasta hoy el anuncio sobre si aprueba la oferta de la firma española o la considera hostil.

Después del visto bueno del mercado, Repsol se presentaba a otra prueba, la del consejo de administración de YPF. Las deliberaciones del máximo órgano de decisión de Yacimientos Petrolíferos y Fiscales (YPF) se prolongaron durante horas y, al final, el consejo decidió mantener la incógnita y retrasar el anuncio de la decisión hasta hoy, aunque los analistas apostaban por el visto bueno a la oferta española. A la reunión no acudieron Alfonso Cortina, presidente de Repsol y consejero de YPF, ni el representantes del Gobierno argentino en la compañía. Los gobernadores de dos de las provincias que tienen acciones de YPF, los de Mendoza y Chubut, dijeron que aceptarían la oferta de Repsol. El de la provincia de Santa Cruz, Néstor Kichner, que milita en una línea interna del peronismo opositora a la gestión del presidente Menem, dijo que tendría que "estudiar bien la oferta y las consecuencias que puede tener para la provincia y para el país". Mendoza tiene casi el 1% de las acciones de YPF y recaudaría 134,3 millones de dólares (21.000 millones de pesetas) para obras de infraestructura. La provincia de Chubut tiene el 0,5% y podría obtener 78 millones de dólares (12.250 millones de pesetas). La de Santa Cruz, donde se asientan gran parte de las reservas petroleras del país, tiene el 6% de las acciones y conseguiría 948 millones de dólares (148.000 millones de pesetas). El Estado tiene el 5,3% y recibiría 837 millones de dólares (131.400 millones de pesetas) por todas sus acciones menos una, la llamada acción de oro que por ley le concede el derecho de veto sobre algunas decisiones consideradas "estratégicas". El resto de las acciones, casi un millón, se reparten entre fondos de pensión, otras petroleras, grandes y pequeños inversores con residencia en Argentina y EEUU.Tras la reunión del consejo, fuentes no oficiales de la compañía aseguraron que, impulsado por el Chase Manhattan Bank, se estaría formando un grupo de empresas del sector, con la participación de Royal Dutch-Shell, Agip y una tercera firma, para la presentación de una oferta competidora con la de Repsol.

Respuesta tardía

La respuesta de los inversores a la iniciativa se ha hecho esperar debido a la situación de la bolsa española, la que menos ganancias ofrece en el año entre los grandes mercados. Pero, los analistas han dado el beneplácito, ya que si todo sale como está previsto, la petrolera española estará entre las 10 mayores del mundo.Hasta el pasado día 29, justo antes de que se hiciera pública la operación, la cotización de Repsol bajaba el 3,23%, pero en sólo dos sesiones ha subido el 14,85%. La acción de Repsol cerró a 16,86 euros. En Buenos Aires, las acciones de YPF se cotizaban a 42,70 dólares, un 2,03% más que el viernes pasado. Al cierre de la sesión el índice Merval registraba un alza del 1,86%. Las acciones de Astra, subsidiaria de Repsol subían el 19,44%. Según versiones de los operadores de la Bolsa, la empresa española se desprendería de Astra si se acepta su oferta por YPF. Repsol ha condicionado la OPA a la adquisición del 51% de las acciones de YPF, es decir, a tomar el control efectivo de la sociedad mediante la adquisición de poco más del 35% de las acciones, ya que en la actualidad posee el 14,9% del capital.

La OPA ha sorprendido por su magnitud -casi 2,1 billones de pesetas (13.437 millones de dólares) por la compra y 2,4 billones de endeudamiento (15.500 millones de dólares) para financiarla con la participación de un grupo de bancos- totalmente inusual para una firma española.

Una parte de la operación, una vez consumada la OPA, se financiará con recursos del mercado por 900.000 millones de pesetas mediante una ampliación de capital y la emisión de títulos convertibles. La escasez de papel en el mercado español parece garantizar la aceptación de la ampliación de capital. La operación tiene una gran importancia estratégica para Repsol. El precio ofrecido por las acciones de YPF, 44,78 dólares por acción, supone una prima del 25% por encima del precio de mercado.