España se ofrece para acoger temporalmente entre 7.000 y 10.000 desplazados de Kosovo

José María Aznar compareció ayer ante la opinión pública, por tercera vez desde el inicio de los ataques de la OTAN contra Yugoslavia, para leer una declaración solemne en la que anunció la disponibilidad de España a acoger refugiados de Kosovo "mientras no puedan regresar a sus lugares de origen". Aunque el presidente eludió concretar la cifra, hasta que los ministros de Interior y Exteriores de la Unión Europea se reúnan mañana y el jueves en Luxemburgo, el Gobierno está dispuesto a recibir entre 7.000 y 10.000 refugiados, lo que supone una operación sin precedentes en España.

La comparecencia de Aznar no respondió a las expectativas creadas, especialmente porque vino precedida por la reunión en La Moncloa de un minigabinete de crisis, al que asistieron, además del presidente, sus dos vicepresidentes y cuatro ministros: Exteriores, Defensa, Interior y Trabajo. Aunque comenzó anunciando que iba a informar de las decisiones adoptadas ayer por el Gobierno, las únicas medidas concretas que hizo públicas fueron la aportación de 8.000 millones de pesetas para atender las necesidades urgentes de los refugiados y la creación de una Comisión Interministerial para coordinar la ayuda humanitaria, que será dirigida por el vicepresidente primero, Francisco Álvarez Cascos.El discurso de Aznar, quien no admitió preguntas, estuvo centrado en contrarrestar la convicción, cada vez más extendida, de que la intervención de la OTAN no sólo no han logrado evitar la catástrofe humanitaria, sino que han contribuido a agravarla. Pese a reconocer que los Gobiernos aliados eran conscientes de "los riesgos" que entrañaban los ataques contra Yugoslavia, aseguró que la operación de limpieza étnica "estaba planeada de antemano", por lo que se habría realizado con o sin bombardeos.

"No podemos abandonar a las miles de personas que están viviendo en este momento en condiciones infrahumanas", aseguró en referencia al éxodo forzoso de más de 300.000 albanokosovares, antes de anunciar que España propondrá, en el Consejo Extraordinario de la UE del jueves, la adopción de un plan global y sistemático de ayuda humanitaria.

Colaboración autonómica

Sin desvelar cuántos refugiados está dispuesta a acoger España, sí apeló a "la generosidad del pueblo español" y pidió la colaboración de las comunidades autónomas, ayuntamientos y organizaciones no gubernamentales. El llamamiento fue acogido de inmediato por los presidentes de Andalucía, Castilla y León, Aragón, Murcia, Cantabria, y Cataluña, entre otros. Jordi Pujol matizó que la acogida de los albanokosovares debe ser temporal, por que "no podemos dar la impresión de que damos por hecho que esta gente quedará expulsada de su país y su tierra".Aunque no se ha hecho pública la cifra, España está dispuesta a acoger entre 7.000 y 10.000 refugiados, según fuentes gubernamentales; frente a los 40.000 que recibirá Alemania, 20.000 Turquía y Estados Unidos, 6.000 Noruega y Dinamarca, 5.000 de Canadá, Grecia y Austria, 3.500 de Suecia y 1.500 de Portugal.

La idea es que el grueso de los acogidos viaje a España en barco. Un primer contingente podría trasladarse en el buque Pizarro, que ayer zarpó de Cádiz hacia Bosnia-Herzegovina con 200 soldados y tenía previsto regresar de vacío. Se trata de repetir, a una escala muy superior, una operación similar a la que se realizó en 1993, cuando un millar de bosnios fueron acogidos en España, alojando a muchos de ellos en un cámping de La Manga (Murcia).

La secretaria general de Asuntos Sociales, Amalia Gómez, tiene previsto reunirse hoy con seis organizaciones no gubernamentales para coordinar la acogida a los refugiados kosovares. Cáritas España abrió ayer mismo una base de datos con familias dispuestas a acoger refugiados, mientras que Cruz Roja había recolectado más de 50 millones de pesetas.

Hoy despegará también desde la base aérea de Getafe (Madrid) un Hércules C-130 con destino a Skopje (Macedonia), que traslada una carga, valorada en 25 millones de pesetas, aportada por la Agencia Española de Cooperación Internacional. Se trata del segundo vuelo con ayuda humanitaria, tras el que realizó el jueves otro Hércules con 10 toneladas de alimentos para Albania. Además, España ha ofrecido dos helicópteros de transporte Chinook, con una dotación de unos 40 militares, y un Escalón Médico Avanzado, con unos 30 efectivos, que podrían desplegarse en la zona para colaborar en el apoyo a los refugiados.

España aún no ha comunicado si participará con tropas en la fuerza que la OTAN proyecta enviar a Albania, con unos 8.000 soldados en total, para apoyar a las autoridades locales ante el flujo de kosovares que cruzan la frontera huyendo de la represión. Por otra parte, los socialistas acusaron ayer a Aznar de "cicatero en la ayuda económica" y "vacilante ante el dolor de los albanokosovares". El candidato a la Presidencia, José Borrell, se dirigió por carta las organizaciones no gubernamentales que operan en la zona de conflicto para "poner al PSOE" y a él mismo a su disposición. Borrell asegura que las ONG están "disgustadas" con el comportamiento de Aznar y se muestra partidario de que el Gobierno "ordene el envío de fuerzas militares terrestres de apoyo a la acción humanitaria", informa Los ministros de Exteriores, Abel Matutes, y Defensa, Eduardo Serra, pidieron ayer su comparecencia urgente y conjunta ante el Congreso esta misma tarde.