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CUMBRE DE LA UNIÓN EUROPEA

La propuesta de Schröder apunta contra el principal objetivo de Aznar

La percepción del ministro de Asuntos Exteriores, Abel Matutes, de que la madre del cordero del Consejo de Berlín sería la batalla sobre los Fondos Estructurales y al Fondo de Cohesión, dos partidas diferentes que se suelen sumar, se convirtió anoche en certeza. La presidencia alemana, con calculada nocturnidad, produjo en su primer documento negociador un ataque frontal contra el Fondo de Cohesión, una partida menor dentro de los recursos destinados a la política de cohesión, pero de enorme carga simbólica para España.

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El Fondo de Cohesión, del que España percibe un 55%, se vería reducido, de prosperar la propuesta alemana tal como está presentada, de más de 21.000 millones de euros (unos 3,5 billones de pesetas) para el periodo 2000-2006 a 15.000 millones de euros. En estos momentos, además de España, Grecia, Portugal e Irlanda perciben recursos del Fondo.El documento alemán pone en una difícil situación a José María Aznar, que había hecho de la defensa del Fondo de Cohesión uno de los ejes de la negociación de la Agenda 2000. Aunque su cuantía es muy inferior a la suma que recibe España por los Fondos Estructurales, de cuyo total obtiene un 23%, la creación del Fondo de Cohesión había sido una conquista española en época de Felipe González, y era el mejor ejemplo de la voluntad de dotar a la Unión Europea de una política progresista de redistribución de recursos para permitir a los países de menor renta salvar la distancia que les separa de los países más ricos.

La diplomacia española se encuentra relativamente confiada en sostener su posición sobre el Fondo Cohesión porque le ampara el protocolo de la Cohesión Económica y Social que se incorporó al Tratado de Maastricht. España sigue sin querer que se reduzca su cuantía, ni que se introduzcan nuevas condiciones para la percepción del fondo, como había pretendido la presidencia alemana con la preparación de un coeficiente que ajuste las cifras a la mejora de la prosperidad nacional en el periodo 1993-1999 . En ese periodo España ha pasado de tener el 75% al 77% de la renta comunitaria. Alemania parece haber apostado más fuerte con su primer documento al reducir el monto total e introducir la revisión de la condición del 90% de la renta en el año 2002.

En la madrugada de hoy, los negociadores españoles, sentados a la mesa negociadora, se abstenían de hacer valoraciones políticas o proyecciones de cifras para dar a conocer en que medida la propuesta alemana afectaría a las arcas españolas en lo que respecta a los Fondos Estructurales. Lo único que se transmitía era el carácter "inaceptable" del documento y la necesidad de que fuera profundamente modificado. Frente a la resistencia española, otros países insitían en la necesidad de agotar la negociación y cerrar hoy vienes el acuerdo final. Aznar puede tener la última palabra que, si no hay acuerdo, consistiría en el siempre comprometido veto.

El ataque de los países más ricos contra el Fondo de Cohesión ya había tenido un primer capítulo con el intento de excluir de él a los países que hubieran accedido a la Moneda Única. Era la forma más rápida de sacar de una tacada a España, Portugal e Irlanda, y dejar como único receptor a Grecia.

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