Sanidad invertirá 38.000 millones hasta el 2003 en mejorar su red hospitalaria y de atención primaria Los 19 nuevos centros de salud y la reforma de Cruces y Basurto, proyectos más importantes
El Departamento de Sanidad tiene previsto construir 19 centros de salud en los próximos cinco años para cerrar la red de atención primaria en el año 2003. Esta es una de las disposiciones que contiene el plan estratégico de inversiones diseñado por la consejería para el periodo 1999-2003, que cifra en 38.000 millones de pesetas el gasto en mejorar y equipar la red de hospitales y la de atención primaria. Estos objetivos aún deben recibir el visto bueno del Departamento de Hacienda, que es el encargado de elaborar los presupuestos y repartir el dinero entre las consejerías.
Junto a los nuevos centros de salud, las reformas de los hospitales vizcaínos de Cruces y Basurto son los proyectos más importantes recogidos en el documento. Los cuatro grandes capítulos de inversión hasta el 2003 son centros de salud, reforma de la red hospitalaria, equipamiento tecnológico de hospitales y ambulatorios y sistema informático. Sanidad pretende elevar el capítulo de inversiones hasta el 5% de su presupuesto, un punto más que en la actualidad. La construcción de centros de salud y la remodelación de ambulatorios supondrá al Gobierno un desembolso de 3.500 millones de pesetas. El plan estratégico establece que la profunda modificación de la estructura de la población, la demanda de mayor calidad y atención al usuario exige, además de nuevas instalaciones, adecuar las edificaciones y despachos donde se presta este tipo de atención sanitaria. En el área sanitaria de Álava se construirán tres centros de salud, todos ellos en Vitoria: Lakuabizkarra, Adurtza-Fournier y Gazalbide-Txagorritxu. En Guipúzcoa serán seis: Amara, Loiola, Zarautz, Oñati, Eskoriatza y Lazkao. Y será en Vizcaya donde se despliegue el mayor esfuerzo, al ser la provincia con mayores carencias. El plan contempla la construcción de diez ambulatorios; el más urgente, el de Matiko-Uribarri, en Bilbao, para el que se busca un local. Renovación hospitalaria Las obras para mejorar la red de hospitales son las que más dinero se llevarán: 15.000 millones de pesetas. En Álava las prioridades se centran en rehabilitar las fachadas del Hospital de Santiago y reformar la unidad neonatal, y en reordenar las consultas del Hospital de Txagorritxu. En cuanto a Guipúzcoa, la red de asistencia clínica se concentra en los hospitales comarcales, que son de última generación y tan sólo requieren mantenimiento. La gran obra se concentrará en el complejo hospitalario que comprende los de Amara, Aranzazu y la Policlínica de Guipúzcoa. Entre las obras más significativas se encuentran la remodelación de consultas externas y la reforma de las unidades hospitalarias 2ª y 3ª de Aranzazu y la adecuación del bloque quirúrgico de la Policlínica. Dos hospitales acaparan la mayor inversión en Vizcaya. Culminar la reforma de Cruces no va a ser sólo responsabilidad de la actual consejería. La envergadura de la tarea traspasará esta responsabilidad al próximo Gobierno, según las previsiones del subdirector del servicio de Arquitectura e Ingeniería de Sanidad, José Sabas. El arreglo de las fachadas, la segunda fase de las unidades de Cuidados Intensivos, la remodelación de la planta de partos, la construcción del nuevo bloque quirúrgico y la culminación del área de psiquiatría son algunas de las obras que hay que realizar. Cruces es el centro de referencia del País Vasco para muchas especialidades y el que dispone de más camas, 950 en total. El Hospital de Basurto también tiene pendiente la adecuación de dos pabellones: uno se dedicará a laboratorio y otro a hospital de día. Además, en la gran zona central se construirá un nuevo bloque quirúrgico. Es el auténtico proyecto estrella de las inversiones hasta el 2003, ya que se llevará entre 3.500 y 4.000 millones de pesetas. Otro aspecto importante en el capítulo de obras será la renovación de la red de ascensores. Sanidad considera necesario invertir al menos 1.200 millones para poner los elevadores al día. "Es difícil convencer a un médico de que vamos a gastar 100 millones en un ascensor si él necesita, por ejemplo, un escáner, pero hay que hacerlo", señala Sabas. "Si un hospital dispone de la última tecnología y no le funcionan los ascensores, la impresión que sacan los usuarios de ese centro es que no es muy bueno. Y lo mismo que en los ascensores, tenemos que gastar mucho en los sistemas de calefacción y refrigeración, es decir, en las tripas de un hospital", añade. Equipos de diagnóstico La inversión en el equipamiento tecnológico de hospitales y centros de salud alcanzará los 12.000 millones de pesetas. "La dotación de medios modernos de diagnóstico y tratamiento", argumenta Sabas, "seguirá siendo una preocupación fundamental de Osakidetza". La política de adquisiciones de nuevos aparatos se hará con el criterio de concentrar la tecnología punta en centros de referencia y el acercamiento de los avances tecnológicos a centros extrahospitalarios de especialidades. Dentro de este apartado, tendrá prioridad el tratamiento del cáncer, con la adquisición del segundo acelerador lineal para los hospitales de Txagorritxu, Cruces y Basurto. Supondrá un desembolso de 500 millones, incluyendo el coste de las obras de instalación. Sanidad destinará a sistemas de información e informática alrededor de 7.500 millones. Sobre todo a dotar a los centros de atención primaria y especializada a la red, a la interconexión de los centros entre sí y a la consolidación de los centros de proceso de datos de las áreas sanitarias.
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