Las televisiones habrán de dedicar el 5% de sus ingresos a las películas europeas

Los operadores de televisión estarán obligados a destinar cada año el 5% de sus ingresos a la financiación de películas "europeas" para cine y televisión. Además, deberán reservar el 51% de su tiempo de emisión a la difusión de obras audiovisuales europeas. Así lo recoge el artículo 5 del proyecto de ley de modificación de la Ley de Televisión sin Fronteras, que fue aprobado ayer en la Comisión de Infraestructuras del Congreso, con el apoyo de todos los grupos. Antena 3 y Tele 5, contrarias a esa medida, no reaccionaron ayer en público a la disposición aprobada.

Los grupos parlamentarios del PP, PSOE, IU y CiU refundieron en una enmienda transaccional la obligación de que los operadores de televisión destinen cada año el 5% "de la cifra total de ingresos devengados durante el ejercicio anterior conforme a su cuenta de explotación" a la financiación de largometrajes y películas para televisión europeas. En un principio, los socialistas habían pretendido situar el listón en el 7%. El portavoz socialista en la comisión de Infraestructuras, Víctor Morlán, aseguró que la norma aprobada representa "una mayor aproximación a la media europea". Para el diputado del PP, José Manuel Peñalosa, la cuota fijada viene a colmar una aspiración del cine.Con la excepción de Antena 3, ninguna otra empresa de televisión de cobertura nacional o autonómica ha hecho públicas aún sus cuentas de 1998. Pero si se establece una estimación teniendo en cuenta las del año precedente, el 5% de los ingresos de todos los operadores podría superar los 20.000 millones de pesetas. La Federación de Asociaciones de Productores Audiovisuales de España (FAPAE), que ha pedido reiteradamente la adopción de esta medida, espera que el cine español reciba una inyección financiera de alrededor de 10.000 millones de pesetas cada año, es decir, al menos la mitad de la cifra a la que teóricamente podría llegarse. El proyecto contempla la posibilidad de que las cadenas inviertan en producciones de otros países europeos.

Otra medida proteccionista de la industria continental es la que obliga a las cadenas de televisión a dedicar el 51% de su tiempo de emisión anual a la difusión de obras audiovisuales europeas. Izquierda Unida presentó una enmienda para incrementar este porcentaje hasta el 60%, pero fue rechazada. Tampoco prosperó una enmienda de Nueva Izquierda para prohibir los cortes de las películas.

Estas medidas forman parte de la norma por la que se modifica la ley 25/1994, por la que se incorporó al ordenamiento español la directiva comunitaria de Televisión sin Fronteras. Con escaso debate político, el nuevo texto aprobado ayer en la comisión de Infraestructuras del Congreso tuvo 35 votos a favor y sólo una abstención (Izquierda Unida). Esa comisión actuaba con competencia legislativa plena por lo que, cumplido el trámite, el texto pasa directamente al Senado.

Los nuevos artículos introducidos pretenden limitar ciertas prácticas televisivas nocivas para los espectadores, como es el caso de la "contraprogramación. Los legisladores reconocen el derecho del público a recibir una información adecuada y verídica sobre la programación prevista y concretamente se hace hincapié en las películas cinematográficas y en la retransmisión de espectáculos.

En este sentido, ayer fue aprobada una enmienda transaccional en la que se especifica que no podrán patrocinarse los telediarios ni los programas de de actualidad política. Tampoco serán "patrocinables" las partes en que puedan dividirse aquellos espacios. El portavoz de IU recordó que es necesario corregir la práctica habitual de patrocinar la información deportiva o meteorológica en los noticiarios.

La nueva ley prohíbe no sólo la publicidad, directa o indirecta, de bebidas con una graduación alcohólica superior a 20 grados, sino también cualquier forma de televenta de las mismas. También define de nuevo el concepto de publicidad encubierta y menciona que las emisiones susceptibles de perjudicar "el desarrollo físico, mental o moral de los menores" sólo pueden realizarse entre las 22.00 y las 7.00, y su contenido ha de ser advertido por medios acústicos y ópticos. Todos los programas deberán ir acompañados de una advertencia que informará a los espectadores sobre su grado de idoneidad para los menores de edad.

En cuanto a publicidad, el proyecto de ley aprobado considera que las autopromociones son publicidad. Por lo tanto, esos anuncios de las propias cadenas, que éstas defienden como mera información al espectador, pasarían a formar parte del tiempo de publicidad, que la ley limita a 12 minutos por hora de emisión.