Urbanismo y Cultura polemizan por el convento de Santa Teresa

La diputada guipuzcoana de Cultura, Koruko Aizarna (EA), se mostró ayer muy disgustada con el diputado de Urbanismo, el socialista Jorge Letamendía, quien anunció el pasado martes el inicio de unas obras urgentes para la reparación y consolidación del convento de Santa Teresa, situado en la Parte Vieja de San Sebastián, y presentó un espectacular proyecto de 533 millones de inversión para la rehabilitación completa del edificio. El enfado de la titular de Cultura de la Diputación de Guipúzcoa se debe a "la alegría con que se presentan los proyectos sin estudiar los usos" que tendrán estas instalaciones, declaró Koruko Aizarna, quien agregó en alusión a su compañero del consejo de diputados que "con el dinero público no se juega; hay que ser más serios". Aizarna explicó que el convento de Santa Teresa, en fase de deterioro alarmante, requiere una renovación "sencilla y útil". El Departamento de Cultura ha consignado una partida de 60 millones de pesetas, que se destinará a realizar un estudio del estado actual del convento e iniciar las primeras obras de restauración. "Nosotros tenemos un proyecto mucho más modesto", dijo Aizarna, "cuya primera fase se iniciará este año con la auténtica restauración arquitectónica del edificio". Proyecto "casi faraónico" El Departamento de Urbanismo y Obras Hidráulicas, que dirige Jorge Letamendía, acometerá en breve una actuación apremiante para apuntalar las partes más deterioradas del edificio y evitar que el destrozo vaya en aumento. Al margen de esta obra puntual, Letamendía mostró los detalles de un proyecto global para la reforma completa del convento de Santa Teresa, propiedad de la Diputación de Guipúzcoa desde el año 1988. El proyecto de Urbanismo, presentado en formato de disco compacto interactivo y en vídeo doméstico, con animaciones por ordenador de los espacios interiores del convento, fue calificado por la responsable foral de Cultura como "casi faraónico", puesto que "está fuera del alcance de los presupuestos que podemos manejar en la Diputación". Koruko Aizarna se declaró partidaria de una utilización "austera" del dinero público, y reiteró que antes de acometer cualquier trabajo de rehabilitación del convento es necesario "definir el destino del edificio". En este sentido, la diputada de Cultura lanzó varias posibilidades para dotarle de contenido al futuro recinto cultural: "Podría ser un complemento del museo de San Telmo o ser sede del museo de la cerámica vasca. En cualquier caso tendrá utilidad cultural y será visitable por el público", apostilló Aizarna. El convento de Santa Teresa se integrará en la línea cultural que comienza en el Paseo Nuevo y termina en Sagüés, trecho en el que se encuentran el Aquarium, el museo naval, San Telmo y el palacio del Kursaal.