Del segundo aeropuerto de Madrid

Leí en la página 4 del suplemento de Madrid de EL PAÍS del pasado 28 de enero la posibilidad, propuesta por el director general de AENA, sobre la instalación del segundo aeropuerto de Madrid en la localidad toledana, que no castellano-manchega, de Ocaña, y la réplica del consejero de Obras Públicas de Madrid acerca del absurdo de instalar el mismo fuera de la Comunidad de Madrid.Independientemente de dónde se instale este segundo aeropuerto, tan necesario para la capital del Reino, el argumento esgrimido por Luis Eduardo Cortés sobre "la ubicación del aeropuerto en alguna de estas localidades obligaría a los pasajeros a coger un tren o un autobús para desplazarse hasta la capital..." no es un argumento sólido, toda vez que hoy, para desplazarse de Barajas a Madrid, es imprescindible coger un autobús o un taxi y sufrir los consabidos atascos en la carretera de Zaragoza (N-II), con el incremento de costes que eso supone en el caso de un taxi.

La instalación de ese segundo aeropuerto en Ciudad Real (otra de las posibles ubicaciones) redundaría en la riqueza de Castilla-La Mancha (una de las regiones más pobres de España), dándose la circunstancia de que en esta ciudad ya hay un medio de enlace rápido con Madrid: el AVE.

Usted, señor Cortés, reconoce la riqueza que genera Barajas, pero no admite que esa riqueza se pueda repartir con el resto de los españoles, más teniendo en cuenta la proximidad de Ocaña o Illescas (que en su día fue otra de las posibilidades para el segundo aeropuerto) a Madrid. Todo se reduce a crear simultáneamente un buen sistema de comunicaciones con Madrid.

Por otra parte, el aeropuerto fuera de Madrid (provincia) es perfectamente viable y aceptable. ¿Por qué es imprescindible, señor Cortés, que el aeropuerto que da servicio a Madrid esté dentro de la Comunidad de Madrid?

¿Por qué vamos a cerrar el desarrollo al resto de provincias y regiones? ¿Qué argumento es el de la distancia? Lo absurdo es pretender construir un aeropuerto, con todas las infraestructuras que implica, dentro de Madrid ciudad, o a sólo 15 kilómetros. Aeropuertos como el de Río de Janeiro se encuentra a más de 70 kilómetros de la ciudad a la que dan servicio, y no es por ello un problema.

No cierre la puerta al desarrollo de los demás escudándose en un chovinismo absurdo y trasnochado.

Con argumentos semejantes se parece demasiado a algunos políticos que alegan la riqueza de su región para reclamar del Estado más y más. Reparta con otros la riqueza, o bien no proteste cuando el señor Jordi

Pujol reclame para Cataluña más competencias y más riqueza.-