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El Gobierno francés se opone a acercar a los presos etarras

Guigou: "No haré excepciones con los terroristas"

El Gobierno francés se opone al acercamiento a sus lugares de origen de los 74 presos de ETA y de Iparretarrak, tal como reclaman Los Verdes, la extrema izquierda francesa y la Liga de los Derechos Humanos, además de los nacionalistas y buena parte de los alcaldes del País Vasco francés. En declaraciones a EL PAÍS, la ministra de Justicia, Elisabeth Guigou, subraya que "no existe posibilidad alguna de que ese acercamiento se lleve a cabo". "Ésa es una competencia de mi exclusiva responsabilidad y no estoy dispuesta a hacer excepciones en la política penitenciaria", subraya Guigou.

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La ministra de Justicia francesa, Elisabeth Guigou, afirma que su país "no va a hacer distinciones en el trato asignado a los terroristas encarcelados, ya sean vascos, corsos, turcos o kurdos". "Todos ellos seguirán estando sujetos a idéntico régimen penitenciario y sometidos a las reglas y los criterios de la Administración", añade Guigou, tras invocar cuestiones relativas a la seguridad y la organización interna.Pese a que la petición de acercamiento de los presos de ETA, entre los que figuran la mayor parte de los integrantes de las sucesivas ejecutivas de la organización terrorista, fue expuesta públicamente por uno de los portavoces de Los Verdes, Guigou cuestiona que el partido ecologista, actualmente integrado en la coalición de Gobierno, sostenga en su conjunto la misma posición.

"Sea como fuere", indica la ministra de Justicia, "van a recibir la misma respuesta negativa que ya han recibido con anterioridad los propios abogados de los terroristas".

"Aquí hay un Estado", enfatiza Guigou, "y lo que cuenta no son los electos del País Vasco, sino la decisión del Estado francés responsable de los intereses nacionales".

Guigou no se muestra dispuesta a modificar su posición ni siquiera ante la hipótesis de que el Gobierno español pida al de París un gesto semejante. "Yo creo que Madrid no va a solicitar nada parecido. En su lugar, yo no lo haría, desde luego", se apresura a apostillar.

Francia, sin embargo, concede trascendencia a la tregua anunciada por ETA a mediados de septiembre pasado "desde el momento en que el Gobierno español ha tomado la propuesta en serio y está dispuesto a adoptar iniciativas políticas que permitan verificar la sinceridad de la oferta y, en su caso, avanzar" en el proceso de paz.

En ese terreno, el Ejecutivo francés dice estar dispuesto a apoyar los esfuerzos del español "porque, naturalmente, siempre es mejor encontrar un arreglo político que ver perpetuarse un conflicto" como el que persiste desde hace ya lustros.

La posición francesa se resume, según su ministra de Justicia, en la consideración de que es España la que debe definir las condiciones políticas del diálogo con la banda terrorista ETA y que Francia está por "aplicar las leyes, tal y como son", y dispuesta a la máxima colaboración antiterrorista "en tanto no haya un arreglo político".

Así, a la pregunta de en qué condiciones estaría el Gobierno francés dispuesto a excarcelar a los presos etarras, la ministra Guigou se limita a responder: "No hay libertad posible si ya han sido condenados por nuestros tribunales".

La titular de Justicia sólo abre la posibilidad de una excarcelación al final de una perspectiva que, hoy por hoy, considera remota. "La cuestión es extremadamente prematura y, además, puedo decirle que en Francia no tenemos recursos para poder excarcelar a los presos así como así". "Lo que tenemos son sistemas de remisión de penas y medidas de gracia que dependen", subraya, "de la Presidencia de la República, no del Gobierno".

La ministra acepta finalmente la posibilidad teórica de que, llegado el caso, el Ejecutivo proponga al presidente la concesión de medidas de gracia para los reclusos. "Eso puede verse en su momento, si es que llega", concluye Guigou.

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