La Junta confirma a los trabajadores de Molina que Campofrío sólo asumirá dos tercios de la plantilla Gutiérrez confía en que el empleo aumente tras la incorporación de la nueva empresa
El presidente de la Junta, Manuel Chaves, aseguró ayer a los trabajadores de Cárnicas Molina que la salida que se negocie tras la liquidación de la empresa será consensuada y no traumática. Lo dijo ayer en Jaén durante la jornada electoral que celebró junto al secretario general del PSOE, Joaquín Almunia. No obstante, no hay posibilidad de negociar al alza con Campofrío el acuerdo por el que esta empresa asumirá a 300 trabajadores de los 473 que configuran la plantilla de Molina. Así lo indicó el consejero de Industria, Guillermo Gutiérrez, después de reunirse con los sindicatos UGT, CC OO y CGT.
Ahora bien, el consejero confía en que Campofrío contratará a más trabajadores una vez que haya iniciado su actividad. La Junta ha conseguido convencer a los sindicatos de que el acuerdo con Campofrío es la única salida para Molina. El 63% de los trabajadores será contratado por la empresa cárnica burgalesa y el resto irá a un proceso de bajas incentivadas y de prejubilaciones. El consejero señaló que los pormenores de las bajas incentivadas, el principal escollo de la negociación, se está discutiendo entre una comisión formada por los tres sindicatos y por el Instituto de Fomento de Andalucía. "El futuro de los trabajadores está más garantizado con Campofrío que con la empresa actual", resaltó Manuel Chaves, quien recordó que el grupo burgalés tiene el 30% de la cuota nacional de mercado y que es la primera empresa del sector, así como una de las primeras a nivel europeo. "Los proyectos de Campofrío son de expansión", dijo. La solución que parece que se va a imponer es la de que todos los trabajadores harán una bolsa con el dinero que les correspondería del Fondo de Garantía Salarial (Fogasa) a través de una asociación de ex empleados de Molina y que se repartirá entre aquellos que salgan de la empresa sin volver a ser contratados. La Junta avalará la operación hasta que el Fogasa haga su aportación, según manifestó Chaves. Cerrar el acuerdo Los sindicatos han asumido esta situación y esperan que la próxima semana esté cerrado un acuerdo al que sólo le faltan retoques técnicos, pero que en sus grandes líneas está ya hablado entre la Junta, propietaria actual de la empresa, y Campofrío. Tanto los sindicatos como Gutiérrez salieron ayer satisfechos de la reunión. El consejero manifestó que se había garantizado que la comisión del IFA que se está reuniendo con ellos tiene plenos poderes para negociar. El consejero recordó que no se trata de una venta de Molina a Campofrío, sino de una liquidación de la primera y de una compra de parte de los activos por la segunda en la subasta. Dijo que Campofrío buscaba entrar en el mercado andaluz y ahí comenzó la negociación. El presidente de la Junta no añadió ayer nada nuevo sobre un posible adelanto de las elecciones autonómicas para que no coincidan con las generales. Su intención, dijo, es agotar la legislatura, pero la decisión que finalmente tome "siempre tendrá en cuenta los intereses generales de los andaluces y no partidistas".
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