Aitana Sánchez-Gijón: "Si se compraron votos, habrá expulsiones"

La presidenta de la Academia de las Artes Cinematográficas, la actriz Aitana Sánchez-Gijón, salió ayer al paso con firmeza de la polémica sobre la supuesta compra de votos de los miembros de la institución para favorecer a alguna película de las que compiten por los Premios Goya de este año. Tras afirmar que "la votación es limpia y blindada", se declaró dispuesta a expulsar a quienes hayan participado en dichas maniobras.

La nueva presidenta de la Academia contestó así ayer a la polémica creada por un anónimo recibido por los miembros de la Academia en el que se leía: "Los mensajeros de don José Luis Garci le anunciamos nuestra próxima visita, en la que recogeremos una vez más las papeletas y le desearemos personalmente un feliz Año Nuevo". En un acto que se celebró en Barcelona para conmemorar la aparición del cuarto volumen de los Cuadernos de la Academia, dedicado a los primeros 12 años de vida de la institución, Sánchez-Gijón, que estuvo en todo momento acompañada por el ex presidente José Luis Borau, afirmó igualmente que "en todo el proceso de votación no intervienen más que los propios votantes y el notario, que es el único que conoce el número de votos que obtiene cada uno de los candidatos. Es imposible manipular este mecanismo".

El productor Pedro Costa, para quien el anónimo de Garci "tiene más gracia" que la respuesta del director, y para quien dicho anónimo es una broma desagradable pero que "resume algo que se respira en la Academia", señaló ayer que todos los cineastas -"sin excepción"- procuran ganarse votos con llamadas a sus amigos, invitaciones a pases de su película o con el apoyo de sus camarillas. Por eso, para él, lo grave del asunto Garci es la sospecha de que la productora del director de El abuelo, Nikel Odeón, haya podido pagar cuotas atrasadas de socios para que éstos pudieran votar. "Existe la certeza de que hay gente que en el último momento ha pagado su cuota para poder votar, y existe la sospecha de que los ha pagado Garci o su productora. Creo que la Academia tiene el deber de aclarar este asunto, ya que ellos tienen la copia de quién ha realizado estos pagos".

A este respecto, tanto Sánchez- Gijón como Borau y el vicepresidente, el cineasta Ventura Pons, manifestaron que aún no se ha probado que nadie haya pagado la cuota de ningún socio. "Cuando entra un nuevo asociado", resaltó Sánchez-Gijón, "debe hacerlo pagando su cuota, a título individual y sin posibilidad de fraude".

Por su parte, la productora de Garci, Nikel Odeón, declinó ayer contestar a estas declaraciones y a las del productor Andrés Vicente Gómez, para quien la actitud de Garci es victimista. El productor de La niña de tus ojos (que asegura que él jamás ha llamado a nadie para intentar inducir su voto) cree que el autor del anónimo, si tenía algo que destapar, debía haberlo hecho dando la cara.

Para otros miembros de la Academia, lo único que deja ver esta polémica es, primero, la importancia económica que han cobrado los Premios Goya, y, segundo, que es el escaso índice de votos de los aproximadamente setecientos miembros de la Academia lo que provoca que las luchas de clanes sean definitivas para que una película arrase o no.