Mueren Celeste Mendoza y Rolando Laserie, dos ídolos de la música cubana

La Habana y Miami han enterrado esta semanas a dos grandes de la música cubana. La primera fue Celeste Mendoza, la reina del Guaganco, quién falleció el sábado a los 68 años en su casa de La Habana, después de haber llevado la rumba al cielo. Un día después, a la edad de 75 años, murió en Miami el legendario sonero Rolando Laserie, único cantante que llegó a hacer alguna sombra a Benny Moré.

La muerte de ambos músicos de la época dorada de la música cubana, se produce en momentos en que la música de la isla comienza a romper las barreras del embargo al que está sometida y se empieza a deshelar la guerra fría. En los últimos tiempos es cada vez más creciente el intercambio artístico entre músicos de ambos lados del estrecho de la Florida.Celeste Mendoza nació en Santiago de Cuba, ciudad sonera por excelencia, pero se crió en el barrio de Los Hoyos, famoso por sus congas y solares marginales, cuya traducción en música es la rumba negra de cajón.

Desde muy niña Celeste demostró sus dotes para improvisar e interpretar con ritmo de guagancó míticos boleros como Que me castigue Dios, Échame a mi la culpa o Soy tan feliz, tema del fundador del movimiento del feeling José Antonio Méndez.

En 1951 comenzó a trabajar en el cabaré Tropicana de La Habana, a las órdenes del famoso Rodney, director de músicos como Bebo Valdés, y su paso por el conocido cabaré le abrió las puertas de la fama.

La voz de Celeste era grave, potente, cálida, de timbre ríspido. Tenía un especial dominio del ritmo y eso le permitió imprimir su personalidad a cualquier tema de música popular que interpretase, algo por lo que fue conocida y elogiada en toda América.

A Celeste Mendoza se debe que la rumba, y en especial su variante del guagancó, saliese de los solares de esos barrios marginales de La Habana y llegara a los escenarios más importantes y serios de todo el mundo.

Una leyenda

El legendario Rolando Laserie falleció el domingo en un hospital de Coral Gables, en Miami, a causa de complicaciones cardiacas mientras estaba a la espera de una operación a corazón abierto. Desde que se fue de Cuba a comienzos de los años sesenta, Laserie compartió escenario con los grandes de la música latina, desde Tito Puente hasta Celia Cruz y otros compatriotas suyos en el exilio.Según los críticos, Laserie fue el único cantante cubano que alcanzó en popularidad al Bárbaro del ritmo, Benny Moré, aunque nunca llegó a tener el reconocimiento social que logró el primero.

La serie hizo famosa la muletilla "de película", que introducía en casi todas sus interpretaciones, y colocó su voz como uno de los emblemas de la música popular cubana.

Más allá de la política y de los desencuentros, esta semana los músicos cubanos que residen dentro y fuera de la isla recordaron a Celeste Mendoza y a Rolando Laserie como dos grandes de la música cubana que dejaron su impronta en la cultura nacional, que es sólo una a pesar del lugar de residencia.