Los pupitres del movimiento
, "Lección 19. Exponer narrativamente el estado de España antes del movimiento. Justificar la necesidad de éste (véase lectura 26 de segundo grado). Explicar en líneas generales la guerra y exaltar sus hechos heroicos (Alcázar, Santa María de la Cabeza, Teruel, Oviedo, Ebro, etc)". Esa es la propuesta de trabajo que reposa sobra la mesa del profesor para un día cualquiera de una clase en la escuela pública, nacional y católica, de la época de la dictadura franquista. Esa mesa, frente a la que se sitúan media docena de pupitres en los que aparecen ordenados los pizarrines, las esponjas, los restos de carboncillo y algunas carteras de cuero curtidas por el tiempo, aparece en un ángulo del patio noble del Museo Provincial de Jaén. Forma parte de una clase en la que se mezclaban alumnos de primaria de todas las edades, presididos por el escudo del águila y una foto de Franco. Es la pieza más voluminosa de la colección de objetos que se han apilado bajo el título 50 años de Escuela y que en realidad resumen lo que fue el sistema educativo español desde comienzos de este siglo hasta la Ley de 1970, la que ahora sucumbe ante la LOGSE. En más de una decena de vitrinas se reparten todo tipo de materiales. Manuel Jódar y Ana Vilches, maestros ambos, son los responsables de la tarea de recopilación que ha dado pie a esta colección, que comenzaron a compilar como producto de su "pasión por los libros de texto". Así consiguieron hacerse con una amplia representación de los diferentes grados de la Enciclopedia Álvarez y decenas de cuadernos escritos con letra picuda, producto de horas de entretenida caligrafía Rubio en la que los colegiales relataban problemas de aritmética. "Un obrero debía percibir una suma de 744,50 pesetas por cierto trabajo que exige tres semanas, exceptuando los domingos, pero solamente emplea en aquel seis días y cinco horas. Si el número de horas que trabaja diariamente es el de 10 ¿qué suma percibe?". Junto al enunciado aparecen, a lápiz y descoloridas, las operaciones que el alumno realizó hace varias décadas. En ese cuaderno, en el que las páginas se sujetan con costuras, aparecen libros de geometría, plumieres, cartillas y un sinfín de objetos en los que no faltan ni los populares Juegos Reunidos Geyper o las muñecas de cartón que copiaban las muecas de Mariquita Pérez. La muestra permite recorrer los textos en que los escolares aprendían a colocar las tildes, ejemplares como el Libro segundo de los niños, arreglado al de la Real Academia para aprender a leer por el método más fácil, corregido y aumentado con las reglas de urbanidad. Luego, recomponían la vida de los santos en los manuales de Historia sagrada o se imbuían de furor nacional en España mi patria por don José Dalmau Carlés. Mientras, sin entender de ratios, unidades para infantil o convenios de construcción Aula 2000, el sistema educativo se formaba de acuerdo con los expresado en textos legales como la Ley de Educación Primaria y Estatuto del Magisterio. Legislación puesta al día hasta el 1 de noviembre de 1963. El objeto más valioso de la colección se llama Catecismo universal mandado leer por el rey nuestro señor. El niño instruido por la divina palabra, una joya literaria de 1807 donde se especifica como seguir el camino correcto, ateniéndose a las normas de la religión católica. La mayor parte de los materiales proceden de la escuela de Canena (Jaén), donde los dos docentes iniciaron su labor investigadora. Los materiales sólo se han expuesto, hasta ahora, en Madrid, coincidiendo con la representación de El florido pensil y en la localidad jiennense de procedencia. Manuel Jódar explica que "todo esto terminó con la Ley del 70" y a partir de ahí el coleccionismo pierde interés para los autores del montaje. Lo que sí les ha interesado es comprobar la transformación del sistema educativo, a pesar de que "siempre ha habido altibajos", señala Jódar. El mínimo más exagerado lo marcó el régimen franquista. Y el pico más elevado, exceptuando la actualidad, se registró durante la II República. Jódar muestra orgulloso volúmenes sobre urbanidad dirigidos a mujeres en los que aparecen los dibujos de niñas sosteniendo libros. "Esto es de 1931 ó 1932", aclara para enfatizar la preocupación, hasta entonces inexistente, sobre la formación femenina. La exposición permanecerá abierta hasta el 19 de diciembre y se enmarca en las actividades que ha organizado la delegación de Educación de Jaén para conmemorar el Día del Docente.
