La píldora no aumenta el riesgo de derrame

Una década después de la introducción generalizada de los modernos anticonceptivos orales de bajas dosis, que contienen una menor cantidad de estrógenos y progesterona que la píldora original, se confirma que su uso no representa un riesgo significativo de sufrir un ictus o accidente cerebrovascular agudo (ACVA), según un estudio que publica en su número de noviembre la revista Stroke.Tras el lanzamiento y la difusión universal de la píldora en los años sesenta, numerosas investigaciones han relacionado su utilización con un mayor riesgo de sufrir un ataque al corazón. Aunque se sospechaba que el riesgo cardiovascular de los anticonceptivos orales de bajas dosis sería menor, hasta ahora no había una evidencia científica tan clara como la que aporta este trabajo, realizado por investigadores de EE UU.

El trabajo de Stroke refleja que las mujeres que toman anticonceptivos orales de bajas dosis tienen un riesgo de sufrir un ACVA sólo ligeramente mayor que el de las mujeres que no los toman. Este riesgo añadido es del 11% en el caso del ictus hemorrágico (causado por una hemorragia cerebral) y del 9% en el ictus isquémico (debido a una falta de riego en el cerebro), pero, en cualquier caso, es estadísticamente poco importante, según los autores del trabajo. La incidencia anual de ictus es de 11 casos por cada 100.000 mujeres.

Esta conclusión es el resultado de un análisis combinado de dos de los últimos y más importantes estudios sobre anticonceptivos y ACVA, realizados en EE UU en la primera mitad de esta década y publicados en 1996 y 1997. En conjunto se han analizado los datos de 373 mujeres de entre 18 y 44 años que habían sufrido un ictus (175 un ictus isquémico y 198 un ictus hemorrágico) más los de una población control de 1.191 mujeres con edades similares. Por lo que respecta al riesgo de sufrir un infarto, tampoco parece aumentar significativamente con el uso de los nuevos anticonceptivos, según una reciente investigación publicada en la revista Circulation.

Como se apunta en el trabajo de Stroke, lo que hasta la fecha no ha aclarado ningún estudio es el riesgo añadido que puedan representar los anticonceptivos orales a bajas dosis en las mujeres fumadoras, hipertensas, obesas, de edad avanzada, con ataques de migraña o con cualquier otra supuesta condición de riesgo. La prescripción de la píldora está desaconsejada en aquellas mujeres que tienen otros factores de riesgo cardiovascular, como el tabaquismo o la hipertensión.