Inyección pública de 3.285 millones para revitalizar la industria en Pasaia
Los gobiernos central y vasco y la Diputación de Guipúzcoa van a firmar un convenio por el que se comprometen a destinar 3.285 millones de pesetas a la revitalización industrial del entorno de la bahía de Pasaia en los próximos cuatro años. El convenio establece la concesión de subvenciones a fondo perdido, créditos sin interés y bonificaciones en los tipos de los préstamos para una inversión de capital privado que se estima en 13.900 millones de pesetas y la creación de 1.000 empleos directos. El diputado general, Román Sudupe, informó ayer de la aprobación del contenido del convenio en las tres instituciones, por lo que sólo resta la firma para su puesta en práctica. El entorno de Pasaia es el área más degradada de Guipúzcoa, con un paro del 13%, cuatro puntos por encima del promedio en este territorio. La participación del Gobierno central a través del Ministerio de Industria y Energía asciende a 577 millones, que es el equivalente a la concesión de créditos por valor de 2.000 millones sin tipo de interés. A su vez, el Gobierno vasco otorgará mediante el programa Ekimen 1.625 millones de pesetas en subvenciones a fondo perdido y créditos bonificados. La participación económica de la Diputación se cifra en 1.083 millones de pesetas. PASA A LA PÁGINA 5
Las instituciones buscan empresas que impulsen el empleo en Pasaia
VIENE DE LA PÁGINA 1 El convenio que van a firmar las tres instituciones tendrá vigencia hasta el año 2001 y plantea una línea de actuación orientada a captar "proyectos tractores", mediante adquisiciones y subcontrataciones de las empresas del País Vasco, que pueden generar valor añadido y empleo indirecto. En esta definición se encuadrarían los planes impulsados por las firmas Ageposa, Tesa, Michelín, Irizar, CAF e Industrias Tajo. Las instituciones prevén una inversión privada de 1.800 millones de pesetas y la creación de 150 empleos directos. Otros 440 puestos de trabajo se promoverán mediante la captación de proyectos que tengan una inversión mínima de 360 millones de pesetas. El monto total de estas inversiones se cifra en 6.500 millones de pesetas. La tercera línea de actuación estará dirigida a la promoción de pequeñas empresas, de forma que se pueda materializar una inversión total de 5.600 millones para generar 400 puestos de trabajo. Convenios pendientes Sudupe subrayó ayer que este convenio atañe sólo a uno de los cuatro ejes de intervención que las instituciones han diseñado para combatir el deterioro socioeconómico del entorno de Pasaia. Quedan pendientes de convenio las actuaciones para la regeneración urbana, el desarrollo portuario y las infraestructuras de la zona. No obstante, el diputado general planteó la necesidad de que se estabilice la estructura organizativa del Puerto de Pasajes, que en el último año ha tenido tres presidentes: José Manuel Aizpurua, Miguel Buen y José Ignacio Espel, designados por el Gobierno central el primero y por el vasco en el segundo y tercer caso, antes y después de la ruptura del tripartito. Con la configuración del próximo Ejecutivo en Vitoria podría darse en poco tiempo el nombramiento de un nuevo máximo responsable de la gestión en el puerto, lo que, a juicio de Sudupe, sólo contribuiría a "crear incertidumbre". Aunque restan por consensuar otros convenios, la Diputación va a proponer que se firme un acuerdo interinstitucional por importe de 900 millones para la regeneración urbana de la zona de Molinao en los próximos tres años. La propuesta consiste en demoler los numerosos edificios en desuso y regenerar todo el área. Por otra parte, la Diputación también gestiona con el Ayuntamiento de Rentería la creación de un nuevo polígono industrial en Txirrita-Maleo que cubra el déficit de suelo existente para hacer viable una recuperación industrial de la comarca. La comarca de Pasaia, en la que se incluyen los municipios de Lezo, Oiartzun, Rentería y el territorio de San Sebastián situado en la vertiente de la bahía, registra uno de los índices de paro más altos del País Vasco y su declive industrial y deterioro urbanístico ha sido similar al que se registró en la Margen Izquierda vizcaína.
