Una sentencia obliga a Nervacero a hacer fijos a tres trabajadores
El Tribunal Superior de Justicia del País Vasco (TSJPV) ha dictado una sentencia en la que obliga a la empresa Nervacero a hacer contratos fijos a tres trabajadores que desempeñaban funciones para la firma bilbaína, pero estaban contratados por la agencia de transportes Basetrade. El tribunal superior condena a Nervacero por realizar "una cesión ilegal de mano de obra" y le conmina a integrar a los tres conductores en su plantilla, "manteniendo sus condiciones salariales", tal como pedía UGT, que demandó a la empresa bilbaína. El tribunal considera probado que los tres trabajadores estaban contratados por la agencia de transportes Basetrade, pero que trabajaban para Nervacero, sometidos a sus condiciones y de acuerdo a los salarios establecidos por la fabricante de barras corrugadas para construcción. Basetrade se desvinculó de Nervacero en diciembre de 1992, pero esta situación no afectó a los tres trabajadores, que siguieron realizando las mismas funciones. En junio de 1997, Basetrade decidió despedir a los conductores, que interpusieron una demanda, de la mano de UGT, para conseguir ser reconocidos como trabajadores de Nervacero. En primera instancia, el Juzgado de lo Social número 2 de Bilbao desestimó las pretensiones de los trabajadores, que recurrieron al Tribunal Superior de Justicia del País Vasco, que ha fallado a su favor. La sentencia da la razón una vez más al sindicato UGT, que ha ganado en lo que va de año tres demandas interpuestas contra Nervacero, por cuestiones relacionadas con la contratación de trabajadores. Esta central demandó a la fabricante de barras por mantener una doble escala salarial y pagar al personal nuevo un 20% menos que a la plantilla antigua. El máximo tribunal del País Vasco dio la razón a UGT, al considerar inconstitucional las diferentes condiciones salariales. El mismo tribunal falló recientemente también a favor de la central, que demandó a Nervacero por contratar personal a través de Empresas de Trabajo Temporal (ETT) y subcontratas.
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