Autorretratos de escritor

Es sorprendente oír a gente sencilla de la calle -un basurero, un empleado de gasolinera, una muchacha joven y vergonzosa- hablar de literatura. Y es más sorprendente ver cómo en Colombia casi cualquier persona puede decir algo sobre Gabriel García Márquez, sobre Macondo, sobre el realismo mágico. Uno de los dos documentales que hoy se emiten en La noche temática (La 2, 22.30) dedicada a las letras iberoamericanas, enmarca de esta forma una larga e interesantísima conversación con el premio Nobel colombiano. Una conversación relajada y profunda que va revelando los paisajes, colores, sonidos y hasta olores que impregnan el universo de este autor. Pero Más allá de Macondo es, además de una pieza televisiva imaginativa y ágil, un gran documento sobre García Márquez. No pretende abarcar toda su escritura, todos los lugares y personajes de su ficción, sino que insiste en algunos de los temas y momentos que han articulado su vida y su obra.

Es más un relato de sus motivaciones que de sus circunstancias. Habla de hasta qué punto y cómo se mezclan literatura y periodismo en su obra; de los miedos que no solo no aplacó sino que aumentó la escritura de Cien años de soledad y explica por qué detesta esa novela; dice también cómo y por qué inventó el dictador arquetípico de El otoño del patriarca y cómo perdió en Barcelona su sensibilidad caribeña.

La segunda producción está dedicada a Álvaro Mutis. Quizá los colombianos de a pie lo conozcan menos, pero los admiradores del creador de Maqroll, El gaviero podrán reconocer en este recorrido por los lugares y recuerdos de su infancia, algunas de las claves de ese personaje. El empaque de este documental es menos fluído que el de García Márquez, algo más deudor de una estética fotográfica, que no aprovecha bien los recursos de la televisión. Aun así, logra extraer del universo de este creador un paisaje evocador.