El PSE matiza que no condiciona la reforma fiscal a subir Sociedades

Los socialistas se muestran confiados en que el acuerdo sobre la reforma vasca del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas pueda producirse antes del 30 de octubre, tal y como pidió anteayer la Diputación de Vizcaya, aunque esperan que no antes del 25, fecha de las elecciones autonómicas. Dirigentes del PSE matizaron ayer su propuesta de reforma fiscal, anunciada el miércoles, y no la quisieron condicionar a la bajada del tipo general del Impuesto de Sociedades en dos puntos y medio.

Los socialistas dijeron que su propuesta no iba condicionada a la reforma de ese impuesto, sino a la creación de un plan sobre el empleo. Los socialistas quieren que se ponga en marcha este plan en la próxima legislatura y consideran que los fondos pueden llegar tanto del Impuesto sobre la Renta como de una subida del Impuesto de Sociedades. En todo caso, en el PSE-EE se considera que este debate será parte de la discusión de un futuro pacto de Gobierno, si llega el caso. Dirigentes del PSE creen que no hay dificultades en lo esencial para llegar a un acuerdo sobre el IRPF con el PNV, cosa que no sería similar con la propuesta del Partido Popular. El único aspecto que les separa, una vez coinciden en la tributación de la vivienda y la familia, es qué hacer con las rentas irregulares. Por otro lado, los secretarios generales de CC OO y UGT de Euskadi, Santiago Bengoa y Carlos Trevilla, criticaron ayer la reforma del IRPF vasco, a la que calificaron de "regresiva" y "precipitada", al tiempo que deploraron la falta de debate social sobre la misma, y el "marketing negociador" que se ha dado en torno a este asunto. Álava y el actual reparto El portavoz del PP en las Juntas Generales de Álava, Ramón Rabanera, defendió ayer el mantenimiento del actual sistema de reparto de los impuestos especiales frente a los cambios que propone el diputado de Hacienda de Vizcaya, Fernando Olmos, a quien acusa de padecer "voracidad recaudatoria". Rabanera expresó en un comunicado la preocupación de su grupo ante la propuesta de modificación, que afectaría a Álava "muy negativamente". En la actualidad, la recaudación de impuestos especiales se distribuye aplicando los porcentajes de contribución provincial fijados en la Ley de Aportaciones, lo que, a juicio del PP, "garantiza un reparto equitativo". El cambio de la fórmula, tanto en los criterios de depósito fiscal como de consumo, causarían un reparto desigual de los recursos obtenidos por razón de los impuestos especiales, por lo que Rabanera apostó por un modelo "que no cause los desequilibrios que provocaría aplicar criterios como el de depósito fiscal o el de consumo". En opinión del dirigente del PP, estos sistemas serían aplicables en un territorio fiscal único, pero no en la modalidad foral. Rabanera ha solicitado la comparecencia del diputado general de Álava, Félix Ormazabal, en las Juntas Generales, tanto para conocer la postura que defenderá y para que acuda a las reuniones del Consejo vasco de Finanzas con el apoyo de los grupos junteros.