La comisión de afectados considera insuficientes las medidas planteadas por el Gobierno catalán

VIENE DE LA PÁGINA 1 En el Consejo Comarcal del Solsonès, Pujol apoyó una propuesta de actuaciones inmediatas que le presentó este organismo, en una reunión a la que no asistieron los tres representantes de Unió Democràtica, que abandonaron la militancia del partido en protesta por la actuación del Gobierno de CiU en el incendio. La propuesta del Solsonès prevé que la madera de pequeño diámetro pueda ser calculada por volumen y no por peso, que se concedan las ayudas de 100.000 pesetas por hectárea para la tala (una subvención que ya existió en 1994, en los incendios del Bages y del Berguedà) y que se plantee la excepción del IRPF sobre la madera quemada. Hay una última propuesta que el Gobierno catalán ve con recelo: que los propietarios forestales puedan tener las mismas ayudas para poder almacenar la madera quemada que la que reciben los empresarios del sector maderero. Además de estas propuestas inmediatas, el Consejo Comarcal elaboró otras en materia de prevención y extinción de incendios que pretende pactar con alcaldes y representantes de los agricultores. Pujol anunció que antes de finalizar el mes de septiembre los ayuntamientos recibirán las ayudas por la extinción de los incendios, el 2 de septiembre se conocerán las primeras 34 ayudas de crédito para la reparación de instalaciones agrarias afectadas y se adelantará una parte del crédito solicitado. El Servicio Catalán de Colocación facilitará que parados acudan a trabajar a los bosques para cortar y retirar la madera, y Obras Públicas acelerará la inversión en las carreteras sin asfaltar. El presidente de la Generalitat salió en defensa de su consejero de Gobernación, Xavier Pomés, de quien dijo que no le aceptaría su dimisión si éste se la llega a presentar, y, sobre todo de los bomberos y de los Mossos d"Esquadra, quienes han sido sometidos, según Pujol, a una "campaña de desprestigio". "Se ha creado una imagen de su actuación que no es exacta y no es justa". En cambio, no quiso analizar el abandono de los militantes de UDC. La comisión de afectados por el incendio consideró ayer mismo insuficientes las ayudas y las medidas aceptadas por Pujol. Josep Puigpelat, portavoz de la comisión y miembro de Unió de Pagesos, explicó tras reunirse con Pujol: "No estamos de acuerdo en que se aprovechen los incendios para arreglar cosas que ya se debían hacer, como las carreteras o la extensión de la red de agua. La prioridad es ahora aprovechar la madera quemada porque durante 70 años no podremos volver a cortar". Para ello solicitan ayudas directas a los propietarios (piden un aval de 3.000 millones de pesetas) para que corten y almacenen, un punto en el que Pujol no cede. La segunda prioridad es "establecer los criterios para poner el terreno en condiciones de regeneración". Sobre el valor de los bosques quemados, Puigpelat explicó: "Aquí, quien vende no tiene capacidad ni estructura para gestionar el valor de los árboles y quien compra tiene ambas cosas y las ayudas del Gobierno. De esta manera, acabaremos vendiendo la madera por debajo de su precio". Lo que se está haciendo, según Puigpelat, "es reforzar cada vez más a los industriales. No estamos de acuerdo y el país deberá saber que tenemos un Gobierno que defiende más a los industriales que al sector público".