Comienza la cosecha del cava de fin de siglo

Las bodegas de Raimat (Segrià), propiedad de la familia Raventós, han sido las primeras de España en iniciar la campaña de la vendimia. Este año se prevé una producción de uva de 10 millones de kilos, que se utilizará para elaborar el cava con el que miles de personas celebrarán el cambio de siglo. La diferencia de temperaturas entre el día y la noche que se dan en la zona favorece la maduración de variedades como Chardonnay y Pinod noir, precisamente las que se empezaron a recolectar el pasado lunes. Este año, debido a la sequía, los racimos son más pequeños, pero tienen mayor concentración de sustancias aromáticas y azúcar, y por tanto la uva es de mayor calidad. Los viñedos de Raimat, con 1.500 hectáreas de superficie, son los más grandes del continente en manos de un mismo propietario. La mayor parte de las tareas de recolección se realizan día y noche con máquinas vibradoras, aunque en las parcelas con fuertes pendientes deben hacerse a mano, para lo cual será necesario contratar a 300 temporeros. La campaña finalizará a primeros de octubre. En el Penedès, la comarca por excelencia del cava, aún no ha empezado la vendimia. La tormenta de granizo, que afectó a más de 700 hectáreas de viñedos en los municipios de Sant Martí Sarroca, Vilobí y Font-rubí, supuso que 200 hectáreas quedaran gravemente dañadas. El tiempo desempeña un factor importante para garantizar la cosecha, ya que a la variedad de uva Parellada, la más delicada, todavía le quedan entre 15 y 20 días de maduración y sólo si en las próximas semanas luce el sol se salvarán las 200 hectáreas de viña del municipio de Font-rubí, pero si vuelven las lluvias peligrará la vendimia.