Viaje a través de la nariz o de una rodilla

"Una exploración por tomografía axial computarizada puede detectar en el cuerpo humano objetos que tengan estructuras tan pequeñas como 0,4 milímetros, y esa misma resolución la podemos obtener en tres dimensiones", afirma Santiago Oliete, jefe del servicio de Diagnóstico Por Imagen de la Clínica Rúber Internacional. "Las técnicas de imagen nos permiten realizar viajes dentro de las fosas nasales, vasos sanguíneos o una rodilla".

Este experto y, su equipo está desarrollando este tipo de técnicas de visualización médica. Mediante un programa de ordenador, se introducen todos los datos del paciente a partir de exámenes exploratorios. Se reconstruyen en tres dimensiones algunas de sus estructuras, como pueda ser el interior de una rodilla, una nariz o un oído, de forma que reflejan fielmente las características particulares de la anatomía del enfermo.

Este tipo de técnicas se denomina endoscopia virtual. No se trata, como la endoscopia clásica, de introducir una sonda con una cámara de televisión en el extremo para viajar y contemplar las imágenes en directo. Los cirujanos no introducen en este caso sonda alguna, sino que reconstruyen en tres dimensiones lo que quieren ver y se preparan para el viaje.

"La diferencia es que viajamos, incluso a veces con más movilidad que con una sonda, con el cursor del ordenador. Podemos, por ejemplo, ver si en el interior de la nariz de un paciente hay algún pólipo o un tumor en la fosa nasal, con la misma precisión que el otorrino que está explorando con su sonda".

Poco valor diagnóstico

Oliete indica no obstante que estas técnicas no pueden mostrar colores auténticos, por lo que no tienen gran valor diagnóstico, puesto que el color, en estos casos, permite diagnosticar con más precisión una patología. Pero no duda de la importancia de estas técnicas para el aprendizaje y, sobre todo, la planificación de futuras intervenciones. "Con tiempo suficiente para desarrollar los programas informáticos, la cirugía virtual será una realidad"."Actualmente se aplican programas informáticos en los tratamientos de rejuvenecimiento facial por láser que permiten ver los resultados, incluso antes de la intervención", asegura Antonio De La Fuente, de la misma clínica.

La técnica se sirve de un rayo láser de dióxido de carbono. "Es capaz de borrar las arrugas de la cara que surgen como consecuencia de la edad, de las manchas que aparecen en la piel motivadas por la continua exposición y envejecimiento producido por el sol", dice este cirujano plástico.

Ya es posible comprobar cuál sería el aspecto del paciente tras la intervención. El trabajo del láser se muestra en una pantalla de ordenador, que simula con bastante exactitud el aspecto a posteriori del paciente.