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Bill Gates no podrá imponer su navegador de Internet en el Windows 95

Las acciones de Microsoft bajan en Nueva York tras una decisión judicial adversa

La justicia de EE UU sigue combatiendo con perdigones al mastodóntico Microsoft. Un juez federal de Washington prohibió el jueves que la empresa de Bill Gates obligue a los fabricantes de ordenadores a incluir su navegador de Internet, llamado Explorer, en el sistema operativo Windows 95. Es la respuesta a una demanda presentada en octubre por la sección antimonopolio del Departamento de Justicia, en la que también se pedía una multa de un millón de dólares diarios a Microsoft hasta que abandonara sus prácticas de abuso del mercado.El juez no consideró justo aplicar esta multa por el momento, ni tampoco aceptó que Microsoft haya cometido un desacato respecto a un acuerdo previo con la Administración. Además nombró a un experto, Lawrence Lessig, profesor de derecho de Harvard, para que estudie a fondo la situación e informe en mayo de 1998.

Veinticuatro horas después de la decisión, la cotización de Microsoft caía 1,31 dólares por debajo de su valor del jueves (137,75 dólares) en la bolsa de Nueva York, mientras que su principal rival, Netscape, subía 2,5 dólares por acción sobre los 28,75 en que estaba valorada.

Aparentemente, la resolución judicial agrada a todas las partes: la Administración y la competencia lo ven como un verdadero zarpazo a Bill Gates y una victoria para el consumidor. Pero Microsoft también cree haber salido ganando: en primer lugar, siempre ha negado que fuerce a los fabricantes a incluir el Explorer en Windows 95; y por otra parte subraya que el juez no ha querido precipitarse en la interpretación de un acuerdo sobre su sistema operativo que firmó hace tres años con el departamento de Justicia.

Efecto inminente

La disputa gira en torno a si Windows 95 y el Explorer son productos separados o no. A Microsoft le interesa que vayan unidos, mientras que la competencia alega que un sistema operativo debe permitir el uso de cualquier navegador. Microsoft hace muy difícil la instalación de otro navegador en Windows 95. A Microsoft le afecta esta decisión de cara al inminente lanzamiento de su sistema operativo Windows 98, que incorpora el navegador Explorer 4.0.Es como si con la compra de un ordenador fuera obligatorio usar un procesador de textos determinado, pero en este caso los matices son complejos. También podría decirse que es como si al comprar un televisor le forzaran a uno a suscribir un determinado servicio de satélite. Pero tampoco, porque el uso del navegador Explorer, que es sólo un programa para visualizar el World Wide Web, no siempre implica el pago a Microsoft de una cuota de acceso. Lo que está en juego en último término es el estándar mundial de acceso a Intemet.

"Microsoft podrá anunciar y promover el Explorer 4.0 igual que lo hace ahora, o de cualquier otra manera, siempre que los fabricantes de ordenadores puedan aceptar o no ese producto", escribió en su decisión el juez Thomas P. Jackson. Joe Klein, la fusta de Bill Gates en el departamento de Justicia, cantó victoria y comparó a Microsoft con la mafia al decir que "a ningún consumidor se le puede negar la elección de un navegador determinado sólo porque Microsoft haya hecho a los distribuidores de ordenadores una oferta que no podían rechazar [se acusa a Microsoft de chantajear con el precio de Windows 95 a los fabricantes que no incluyan el Explorer]".

Netscape manifestó su agrado con la resolución. Microsoft, por su parte, sigue diciendo que no ha roto ningún acuerdo y que la integración del Explorer en Windows 95 es buena para los consumidores.

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