ERC y el Partido Popular reafirman su exclusión del bloque parlamentario que apoya la ley del catalán
A los independentistas de Esquerra Republicana de Catalunya (ERC), la futura ley del catalán les sabe a muy poco. A los conservadores del Partido Popular (PP), en cambio, les causa empacho. Los dos extremos del Parlament de Catalunya en materia nacional -el Partido Popular y Esquerra Republicana- reafirmaron ayer su exclusión del bloque mayoritario que apoya la proposición de ley de política lingüística.
Pero otros independentistas, los del Partit per la Independència (PI) de Angel Colom, sí se sumaron al pacto suscrito por Convergèncía i Unió (CiU), el Partit dels Socialistes (PSC) e Iniciativa per Catalunya-Els Verds (IC-EV); un pacto que garantiza la cómoda aprobación de la ley. El Partit per la Independència aceptó ayer la propuesta socialista de que la inclusión del deber genérico de conocer el catalán no figure en el articulado de la ley, sino en el preámbulo. De este modo, la referencia a tal deber es meramente retórica, ya que no obliga a nadie ni a nada.
El PI mantiene viva, sin embargo, su enmienda que reclama incluir dicho deber en el artículo 4, aunque Colom admitió ayer que la referencia pactada en el preámbulo ya es suficiente para que su partido se sume al bloque parlamentario que respalda la ley.
Dos horas de reunión
Colom pactó este extremo ayer por la mañana con el líder del PSC, Narcís Serra, en una reunión que duró casi dos horas. Al término del encuentro, Serra negó que el acuerdo estuviera completamente cerrado: no quería que se anunciara en la sede del PI, lugar de la reunión, sino en el Parlament y con la presencia del presidente del grupo socialista, Joaquim Nadal.Dirigentes próximos a Narcís Serra habían señalado días pasados que si tal como parece el PP se va a quedar fuera del consenso sobre la lengua catalana, a los socialistas les interesaba tácticamente que los independentistas también quedasen al margen. Así el PSC podía argumentar ante su electorado castellanohablante que el acuerdo representaba una opción equilibrada.
Por la tarde, la comisión de cultura de la Cámara catalana aprobó el dictamen de la proposición de ley con los votos de CiU, el PSC, IC-EV y el PI. Enfrente de este bloque, y por razones diametralmente opuestas, el PP y ERC reafirmaron su exclusión, al menos por el momento, del consenso lingüístico.
El texto será recibido hoy por el Consejo Consultivo de la Generalitat para que dictamine sobre su compatibilidad con el marco constitucional. Luego, posiblemente antes de Navidad, la ley será debatida y aprobada por el pleno del Parlament.
El bloque mayoritario aprobó ayer sus propias enmiendas a la proposición de ley y rechazó todas las propuestas por el PP y ERC. El presidente del grupo conservador, Josep Curto, calificó el texto aprobado de " panfleto tramposo" que contiene cuotas y sanciones. Pero no aclaró si el PP votará en contra o se abstendrá en el pleno.
El líder de ERC, Josep Lluís Carod-Rovira, telefoneó al presidente catalán, Jordi Pujol, para prevenirle de su disposición a votar contra una "ley aguada que no normaliza el uso del catalán, sino que garantiza el del castellano".
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.