La obra de Pessoa crea en Portugal una polémica sobre derechos de autor

¿Es posible reprivatizar la obra de Fernando Pessoa después de que fuera pública desde 1985? La desidia del Estado portugués, que no ha incorporado a su ordenamiento jurídico una directiva comunitaria de 1993 que devuelve a sus herederos la exclusiva de sus derechos hasta el año 2007, ha provocado un grave conflicto legal y una seria polémica entre las editoras lusas. La sobrina de Pessoa, heredera de sus derechos, Manuela Nogueira, dice que "debe haber alguna manera elegante de rodear el problema sin que Pessoa pierda".Manuela Nogueira cedió recientemente los derechos a la editorial portuguesa Assírio & Alvim, cuyo propietario, Hermínio Monteiro, comunicó a 15 de sus competidores que "suspendieran de inmediato" cualquier edición de esa obra "en base a la citada directiva", aunque precisaba que la compañía estaba "dispuesta a dialogar sobre cualquier compromiso asumido anteriormente".

La Sociedad Portuguesa de Autores (SPA) sostiene que "la directiva está en vigor". Por el contrario, el Ministerio de Cultura entiende que "la directiva comunitana solo entra en vigor después de su incorporación a la legislación nacional".

La mayoría de las editoriales ha decidido no respetar la directiva comunitaria y seguir con sus proyectos. Veiga Fernandes, de Teorema, se muestra "absolutamente contrario a la ampliación comunitaria a los 70 años", y sostiene que "la directiva no vale de nada mientras no sea incorporada a la legislación nacional". Francisco Vale, de Relógio d'Agua, afirma: "La obra de Pessoa es patrimonio nacional y no puede ser propiedad de una sola editora porque plantea incluso serios y específicos problemas sobre los textos inéditos o las reediciones; la solución sería que una fundación se encargase de controlar la edición de toda la obra". Sólo Presenta, que dirige Francisco Espadinha, ha decidido suspender todas las ediciones en marcha.