Sin incidentes en la marcha de una nueva flotilla anticastrista
La protesta anticastrista que una flotilla de exiliados efectuó la tarde del sábado cerca del límite de las aguas jurisdiccionales cubanas concluyó anoche sin incidentes a 14 millas de las costas de la isla caribeña. Cuba y Estados Unidos habían reforzado las medidas de vigilancia aérea y naval en el estrecho de la Florida.La flotilla, compuesta por ocho barcos y dos avionetas, según fuentes cubanas, salió el viernes y el sábado desde Cayo Maratón y Cayo Hueso, en el sur de Florida, y se iba a distribuir en tres grupos frente a las costas de La Habana, Caibarien y la localidad de Punta Gorda, en el oriente de la isla, con el propósito de "promover un paro nacional por la democracia". Los organizadores hablaron de 35 barcos y 14 aviones.
Como en anteriores ocasiones, los dos Gobiernos coordinaron sus acciones en alta mar para evitar incidentes, y también advirtieron previamente a la organización anticastrista promotora del acto, el Movimiento Democracia, de Miami, que si alguna de las naves o aviones penetraba en territorio cubano, debían atenerse a las consecuencias.
Estados Unidos, por su parte, defendió el derecho de los grupos del exilio de "manifestarse pacíficamente", pero advirtió al Movimiento Democracia que si alguna de sus embarcaciones violaba las aguas cubanas, estaría violando también las leyes norteamericanas, por lo que podrían ser procesados en EE UU.
"Riesgos innecesarios"
El portavoz del Departamento de Estado, Nicholas Burns, explicó, además, que las autoridades de La Habana niegan la asistencia consular a los ciudadanos estadounidenses nacidos en la isla, por lo que si las autoridades de La Habana detuvieran a alguien dentro de su territorio, "la capacidad de asistencia de Estados Unidos quedaría muy limitada". Burns afirmó que Estados Unidos había informado a la otra parte de las "intenciones pacíficas y legales de los organizadores de la flotilla" en interés de "evitar riesgos innecesarios para todos los participantes", y señaló que habían solicitado a La Habana que "no se use una fuerza excesiva".Decenas de barcos de la Marina de Guerra y del Servicio Guardacostas cubanos establecieron un dispositivo de vigilancia frente a las costas de La Habana, mientras que varios buques norteamericanos realizaron labores de vigilancia en la zona donde debía manifestarse la flotilla. El Movimiento Democracia, que el año pasado ya realizó varias protestas de éste tipo, anunció que este año promoverá nuevas excursiones a la isla, hasta culminar con la llamada Flotilla para Ejercitar Nuestro Retorno, que se ha preparado para enero de 1998, durante la visita del Papa. Según las autoridades cubanas, con este tipo de acciones los grupos del exilio pretenden provocar un incidente como el que ocurrió el 24 de febrero del año pasado, cuando cazas cubanos derribaron dos avionetas de Hermanos al Rescate.
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