Guipúzcoa ofrece suelo a bajo precio para atraer a multinacionales

La Diputación foral de Guipúzcoa estudia ofertar grandes extensiones de suelo a bajo precio para atraer a grandes multinacionales a la provincia. La iniciativa ha partido de los socialistas Guillermo Echenique y Jorge Letamendia, diputados de Economía y Urbanismo, respectivamente, que prevén reconvertir terrenos industriales abandonados y adquirir suelo por valor de 2.000 millones de pesetas en diversas localidades guipuzcoanas y ofertarlo a grandes empresas. El proyecto, que cuenta con la aprobación de PNV y EA, los otros dos socios de gobierno del ente foral, pretende equiparar Guipúzcoa con las otras dos provincias vascas, en cuanto a asentamiento de transnacionales.Mientras la macroempresa coreana Daewoo ha elegido Alava para instalar una planta de frigoríficos y no descarta ampliar sus inversiones en la provincia y Volkswagen ha puesto. los ojos en Vizcaya para una inversión multimillonaria, Guipúzcoa no cuenta con ningún proyecto de esta envergadura. La Diputación foral guipuzcoana pretende ahora cambiar esta situación y, de momento, tiene prevista una oferta inicial de 400.000 metros cuadrados para empresas de cierta entidad.

En cuanto a los recursos interpuestos por la Administración central contra las normas del Impuesto de Sociedades, que fueron aprobadas por las diputaciones de Vizcaya, Guipúzcoa y Alava a principios del pasado verano, el Gobierno Vasco manifestó ayer su "rechazo y disconformidad". El Ejecutivo anunció ayer que utilizará todos los instrumentos posibles para la defensa jurídica de las normas recurridas y efectuará "de inmediato cuantas gestiones sean precisas" para lograr la retirada de los recursos.

La Hacienda de Vizcaya, mientras, ha detectado en los nueve primeros meses del año una deuda tributaria cercana a los 20.122 millones de pesetas. El incremento de la labor de inspección ha permitido que sólo en el citado plazo la deuda supere en más un 50% a la contabilizada el pasado ejercicio. La partida más importante corresponde a lo adeudado en el Impuesto sobre el Valor Añadido (IVA), 11.500 millones de pesetas.

La Diputación de Vizcaya ha puesto en marcha esta legislatura un plan especial de lucha contra el fraude fiscal, que coincide con otras medidas de reforma, como los cambios en el Impuesto de Sociedades. El diputado vizcaíno de Hacienda, el peneuvista Fernando Olmos, anunció ayer la próxima creación de un cuerpo propio de inspectores, fiscales.

Dentro de la deuda tributaria en el IVA, se han contabilizado unos 4.600 millones que la Hacienda vizcaína reclama a Repsol por operaciones relacionadas con el yacimiento gasístico Gaviota. Los responsables de Hacienda calculan, por otra parte, que las arcas de Vizcaya han dejado de ingresar cerca de 1.000 millones de enero a septiembre de este año por las suscripciones de bonos austriacos, no sujetos a retención.