El Gobierno no acudió a la llamada de los investigadores

Ningún representante del Gobierno acudió ayer a la sesión dedicada, al marco político de la investigación científica y técnica en las jornadas sobre el valor estratégico de este sector que han organizado investigadores de la universidad y el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC). Un portavoz del secretario de Estado de Universidades, Investigación y Desarrollo, Fernando Tejerina, señaló ayer que los organizadores estaban avisados de que no iba a asistir, a pesar de lo cual fue incluido en el programa, así como el director general de Investigación y Desarrollo. Sí intervino la portavoz del PP en la Comisión Mixta de Desarrollo Científico Congreso- Senado.Los investigadores y ex-gestores que acudieron a las jornadas, planteadas como una reflexión sobre la política científica en España, se quedaron sin conocer los planes concretos del Gobierno. "No puedo decir nada concreto porque no hay nada concreto", arguyó la diputada Blanca Fernández-Capel, acosada a preguntas por algunos de los asistentes, por otra parte no muy numerosos. Se refería sobre todo al porcentaje de PIB que será dedicado a ciencia y tecnología en los próximos presupuestos. El partido, dijo, "incita" al Gobierno para frenar el descenso de los últimos años en este capítulo.

Su intervención estuvo dedicada a identificar problemas ya conocidos, como la dificultad de bsorber a los doctores formados (que un asistente definió como una nueva "fuga de cerebros") y la necesidad de que la industria investigue.

Y cuando, al final, afirmó que el programa del PP considera importante un impulso del estudio de las humanidades y dijo que es inconcebible que un científico no sepa quién fue Palas Atenea, él murmullo de los asistentes creció. Uno de ellos le recordó que los científicos suelen saber mucho más de literatura, por ejemplo, que los literatos de ciencia.

Su contrincante político fue el ex ministro de Educación y Ciencia, Alfredo Pérez Rubalcaba, quien hizo hincapié en la conveniencia de no tocar la actual estructura "suficientemente flexible" del sistema español de ciencia y tecnología, emanado hace 10 años de la Ley de la Ciencia. Pérez Rubalcaba también se refirió a la inquietud creada entre los investigadores por la situación actual, reflejada en el llamado Manifiesto del Escorial.

Joan Albaigés, de la Generalitat de Cataluña, señaló la falta de coordinación en la investigación como el mayor lunar de la etapa anterior y reconoció que la creación de sistemas paralelos en las autonomías -aunque beneficiosos al principio-, ahora pueden entrañar una pérdida de competitividad exterior.