El Reino Unido aprueba la producción del Avión Europeo de Combate
El Gobierno británico se convirtió ayer en el primero de los cuatro, países -entre ellos España- participantes en el proyecto del Avión Europeo de Combate (Eurofighter) en aprobar la producción de] revolucionario modelo. La decisión británica significa un compromiso de] Ejecutivo de invertir 1.500 millones de libras (unos 300.000 millones de pesetas) en la puesta en marcha de la producción, y viene a añadir nueva presión a los socios europeos para que den el visto bueno definitivo a un proyecto valorado en 40.000 millones de libras.
"Soy consciente de la presión" que esto representa para los restantes socios, dijo ayer el ministro de Defensa, británico, Michael Portillo, al anunciar la medida junto con un primer pedido de 232 aparatos del nuevo modelo para la Fuerza Aérea británica (RAF) en la inauguración, ayer, de la Feria de Aviación de Farnborough. Un contrato por valor de 16.000 millones de libras (más de tres billones de pesetas) que recibió el apoyo de los portavoces de los principales partidos políticos del país. El ministro conservador justificó la decisión en aras de la defensa del Reino Unido y de la importancia de "asegurar que la industria aeroespacial europea se mantenga a la cabeza de los avances tecnológicos".La decisión británica no ha sido tomada, sin embargo, al margen de los restantes socios del proyecto. Durante los últimos meses se han desarrollado intensas negociaciones entre, los cuatro Gobiernos implicados y los fabricantes del avión con vistas a lograr precios más ajustados. Las empresas implicadas son British Aerospace, por el Reino Unido; Daimler-Benz Aerospace (DASA), por Alemania; Construcciones Aeronaúticas SA (CASA), por España, y Alenia, en el caso de Italia. La ligera reducción de precios obtenida en estas negociaciones ha permitido al Gobierno británico lanzarse a la producción con cierta rapidez, tras largas demoras.
Un Eurofighter sobrevoló ayer la feria, tras el vuelo de prueba realizado con éxito por el prototipo del avión español el sábado pasado. Alemania, uno de los más poderosos contribuyentes al proyecto que nació en 1985, se ha mostrado reticente a seguir adelante con un programa cuyo elevado coste ha encontrado serios obstáculos -en el camino hacia su aprobación parlamentaria. Acosado por las reticencias que ha despertado el avión de combate en un país que se ha fijado como meta esencial cumplir los criterios de Maastricht para proceder a la unidad económica y monetaria en la Unión Europea, el Gobierno alemán ha llegado a insinuar la posibilidad de que se pospusiera un año la fabricación del avión. Sin embargo, los fabricantes con sideran la producción, inmediata del Eurofighter como una pieza clave para asegurar su rentabilidad, ya que el modelo de avión de combate que prepara Estados Unidos -Joint Striker Fighter- no estará listo hasta el año 2010.
España e Italia están dispuestas a emular al Reino Unido y anunciar la puesta en marcha de la producción del avión de combate este. otoño. En todo caso, se espera una decisión conjunta de los cuatro países a comienzos de 1997.
Michael Portillo se felicitó de la decisión, ya que el nuevo avión representa "un paso adelante, con su flexibilidad de operaciones capaz de responder. a los desafíos inciertos del próximo siglo". Otra de las bazas a favor del Eurofighter esgrimida por el titular británico de Defensa es que su fabricación dará trabajo a 14.000 personas. El avión será ensamblado en Lancashire y sus dos motores serán fabricados por la británica Rolls Royce (no relacionada con la firma de automóviles).
El modernísimo avión sustituirá a los Tornado F-3 a partir del año 2002. La noticia ha sido criticada por sectores contrarios a tan elevados gastos en defensa, que consideran que los 14.000 empleos que se generen saldrán excesivamente caros, a algo más de un millón de libras
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