Miró califica de censura económica la política del PP sobre el cine

Pilar Miró criticó ayer en El Escorial el recorte presupuestario que el Gobierno del PP prevé para las ayudas económicas al cine español, según informa Juan Francés. "Es lo que los cineastas llamamos la censura económica", se quejó ayer Miró. Para ella el auge de los nuevos realizadores españoles se verá frenado ante dichos recortes: "Ahora en España hay muy buenas películas y jóvenes directores, lo que hace falta es que se les dé la posibilidad de continuar en su trabajo, de hacer sus segundas y terceras películas. No se debe cercenar esa evolución por temas económicos. Miró realizó estas declaraciones antes de exponer su conferencia Esta prohibido (la censura) dentro del curso Cine español como un espeio, que la Universidad Complutense organiza en San Lorenzo de El Escorial.Miró arremetió contra las recientes manifestaciones del secretario de Estado de Cultura, Miguel Angel Cortés, por sus críticas al cine español de los últimos 12 años. "Me siento dolida y ofendida, aunque las declaraciones del secretario no deben tenerse en cuenta. Son majaderías que salen de una rueda de prensa", afirmó. "Todos los directores queremos hacer películas comerciales, que las vea mucha gente, y no que aburran a las ovejas", apuntó.

La polémica cruza fronteras

Por su parte, el diario francés Le Monde se hace eco en su edición de ayer de la polémica que enfrenta a los cineastas españoles con el secretario de Estado de Cultura, Miguel Ángel Cortés, al que presenta como "el inspirador de la cultura de la derecha", como persona que mantiene "un discurso ultraliberal" y cree que "la excepción cultural no le interesa a España", informa . El diario lamenta que Cortés sea "partidario de un sistema de ayuda automática proporcional a las recaudaciones en sala, lo que equivale a sostener sólo el éxito comercial y no la creatividad artística".Para los franceses, principales impulsores de la noción de "excepción cultural", el debate es importante porque, hasta ahora, España había apoyado en Bruselas y Estrasburgo, la actitud francesa que reivindicaba que la cultura debe quedar al margen de los reglamentos comerciales. El director Fernando Trueba, entrevistado por Le Monde, declara considerar "necesaria una política cultural y audiovisual europea", objetivo que hoy, siempre según el cineasta, "sólo puede articularse a través del sistema francés".

Le Monde critica a Cortés y recuerda que el secretario de Estado utiliza los datos catastróficos de 1994, cuando el cine español sólo atrajo al 7,1 % de los espectadores, en vez de los de 1995 que, con un 11,9%, traslucen una importante recuperación. También pide el diario la opinión de Pedro Almodóvar, para quien lo peor del discurso de Cortés estriba en que "habla de liberalismo como si el mercado fuese libre, como si no estuviese enteramente en manos de un oligopolio americano".