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La biotecnología cambiará el mundo, como el 'software'

BILL GATESLa medicina experimentará grandes progresos en el futuro y buena parte de los avances se deberán a la biotecnología, una especialidad que se apoya cada vez más en la informática

Bill Gates

A veces la gente me pregunta a qué campo me dedicaría si no estuviese en la informática. Creo que me dedicaría a la biotecnología. Espero ver impresionantes progresos en medicina en las dos próximas décadas, y los investigadores y las empresas de biotecnología serán esenciales piara ese progreso.Soy un firme creyente en la tecnología de la información y en cómo revoluciona el modo de trabajar, jugar y aprender de la gente. Pero sería difícil discutir que la floreciente revolución médica encabezada por la industria de la tecnología no sea menos importante para el futuro de la humanidad. También capacitará a la gente y elevará el nivel de vida.

Los investigadores amplían nuestro conocimiento de cómo funciona el organismo en el nivel más fundamental, y este conocimiento nos permite entender mejor las enfermedades y la forma de tratarlas.

Queda mucho trabajo por hacer, pero científicos de todo el mundo, que a la vez compiten ferozmente y colaboran, lo están haciendo a marchas forzadas.

Cuando la gente oye el término biotecnología, a menudo piensa en división de genes y otras formas de ingeniería genética. Ésta es una rama importante de la ciencia, pero no es la parte más esencial.

Los mayores adelantos en medicina serán el resultado del trazado de mapas y la comprensión del genoma humano: explicar la secuencia exacta de los 3.000 millones de nucleótidos que componen los 100.000 genes que se calcula que son el croquis colectivo de los seres humanos. Es un trabajo inmenso.

Si los científicos identificasen la localización exacta de una diminuta unidad de información genética por segundo 24 horas al día todos los días, se tardaría un siglo en trazar el mapa de los 3.000 millones. Gracias a los ordenadores y a la tecnología especializada, investigadores de todo el mundo trabajan a un ritmo colectivo mucho más rápido, y el proyecto podría completarse en sólo una década.

Hasta ahora, el mapa muestra la mayor parte de las principales características del genoma y muchos detalles sobre partes selectivas del mismo. Si utilizamos como analogía un estudio sobre la Tierra, hasta ahora hemos establecido la localización de la mayor parte de los países y de muchas ciudades grandes y hemos trazado mapas detallados de muchos barrios importantes.

Esta investigación es clave para tratar las enfermedades. Una enfermedad para la que no existe una terapia eficaz es un misterio sin resolver. Los investigadores médicos necesitan pistas para inventar un medicamento o una terapia eficaces para la enfermedad. Lo que necesitan es un golpe de suerte en el caso, una prueba valiosa que les pueda impulsar en la dirección adecuada.

Una de las formas más prometedoras de encontrar esta clase de pista es comparar con minucioso detalle la estructura genética de personas emparentadas, algunas de las cuales tienen una enfermedad que afecte a la familia y otras no. El objetivo de este trabajo detectivesco es encontrar un gen mutante (un gen que tenga revuelta parte de su información genética) en las personas afectadas.

Una vez que se ha asociado un gen con una enfermedad, se puede utilizar para encontrar formas de interferir en ella. Si se descubre un medicamento u otra terapia para tratar a gente que tenga una predisposición genética a la enfermedad, puede funcionar también en el caso de los demás.

Creo que terminaremos por inventar terapias para la mayor parte de las enfermedades, un logro que, antes o después, mejorará la vida de casi todo el mundo antes. Se tardarán muchas décadas, quizá incluso varías generaciones, en alcanzar este objetivo, pero todos los progresos que se hagan a lo largo del camino son extremadamente útiles.

La biotecnología no es mi línea de trabajo, pero me gusta seguir su progreso como afición. Ayudé a financiar un programa de biología molecular en la Universidad de Washington y formo parte de las juntas de ICOS Corporation y Darwin Molecular Corporation, pequeñas empresas privadas de biotecnología. (Aunque hay montones de grandes empresas en el campo, cualquiera que piense en invertir debería entender que es difícil distinguir los ganadores de los perdedores, así que es muy arriesgado).

Una de las razones por las que me atrae la industria de la biotecnología es que aprovecha muy bien la tecnología de la información. Los ordenadores son un instrumento fundamental para examinar el genoma con objeto de encontrar modelos que encajen entre sí, formar sistemas complejos y comunicarse con otros investigadores.

Los investigadores que trazan mapas del genoma en países de todo el mundo utilizan el correo electrónico para compartir ideas. Presentan los resultados en Internet y buscan información detallada sobre el trabajo de otros. Por ejemplo, Darwin ha construido una moderna red interna (intranet) para ayudar a sus investigadores a navegar por la inmensa red de datos sobre genes que hay disponibles tanto dentro como fuera de la empresa.

Con la ayuda de Internet y de otros modernos instrumentos de información, un equipo formado por científicos de Darwin, entre otros, tardó sólo ocho meses en descubrir un defecto genético que puede llevar al envejecimiento prematuro. Los investigadores se abrieron camino entre 650.000 nucleótidos hasta que encontraron un gen mutante culpable del síndrome de Werner, que hace que la gente de 40 años tenga el aspecto (y los achaques) de los ancianos de 80 años.

De no ser por Internet, se habría tardado años en hacer este descubrimiento. Internet no sólo permitió enviar mensajes entre los investigadores de diferentes lugares, sino también examinar bases de datos internacionales de información genética en cuestión de minutos en lugar de durante días en una biblioteca física.

Es emocionante ver que los ordenadores y las tecnologías de la comunicación se utilizan con tanta eficacia y con tan buenos propósitos. Aunque los PC e Internet sólo sirviesen para impulsar la investigación médica, todo lo que hemos invertido en estos instrumentos de información habrá merecido la pena.

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