El ministro de Sanidad dará prioridad a los centros públicos para Ias listas de espera
Las clínicas privadas acogen con sorpresa la decisión del Gobierno valenciano
El ministro de Sanidad, José Manuel Romay, se mostró ayer partidario de acudir a centros privados "como un complemento apreciable", pero afirmó que para reducir las listas de espera aplicará "con absoluta prioridad el mayor aprovechamiento de los recursos públicos". El plan de choque anunciado hace dos días por el Gobierno valenciano que prevé una contratación masiva con clínicas privadas, que ayer lo desconocían, es "un auténtico disparate" para el portavoz socialista de esta comunidad, Antonio Moreno.
Moreno consideró que antes de desviar pacientes a las clínicas privadas la Administración debe agotar todas las posibilidades que ofrezcan los hospitales públicos para reducir las listas de espera."Durante el mandato socialista ya se realizaban conciertos con el sector privado, pero se incentivaba a los facultativos que trabajaban por las tardes y el PP ha eliminado ese programa de incentivación", señaló Moreno. El portavoz socialista ya ha anunciado que pedirá explicaciones al Gobierno valenciano sobre el tipo de actividad que realizan esos ocho hospitales en los que el PP dice haber implantado la apertura de quirófanos por las tardes. "Habrá que ver si son operaciones quirúrgicas o intervenciones de cirugía sin ingreso".
El ministro Romay señaló en Madrid que durante su gestión al frente de la sanidad gallega, la sanidad privada fue un complemento "apreciable y estimable, pero de ninguna manera decisivo" ya que la reducción de las listas de espera en esta comunidad se hizo "básicamente con un mejor aprovechamiento de los recursos públicos", aseguró.
2.000 millones de deuda
El Gobierno valenciano anunció que va a invertir 3.000 millones de pesetas en conciertos con clínicas privadas para solucionar las listas de espera de más de 90 días, que afectan actualmente a más de 33.000 pacientes. El portavoz del PSOE se pregunta de dónde sacará el Consell esos millones, ya que del presupuesto de 1995 destinado a conciertos, queda una deuda pendiente de 2.000 millones. "Tendrán que explicar si para pagar a las clínicas esos 3.000 millones y la deuda pretenden ahorrar a base de eliminar prestaciones de la sanidad pública", añadió Moreno.La mayor sorpresa ayer fue sin duda la de la Asociación de Centros Asistenciales de Hospitalización Privada de Valencia. Su presidente, Angel Alegre, manifestó: "Hemos sido los primeros sorprendidos", tras afirmar que conocieron la noticia a través de los medios de comunicación. Alegre añadió que "sin conocer las patologías, es difícil hacer valoraciones". Destacó que la medida puede generar cierta "inquietud" entre los ciudadanos a riesgo (le que se produzca una avalancha de pacientes que acudan a los centros privados directamente. Alegre considera "positivo" que se utilicen recursos privados para atajar el problema de las listas de espera, pero recuerda que "todo dependerá de la capacidad de cada hospital".
Tampoco ocultó su malestar el portavoz de EU-Els Verds, Alfredo Botella, quien calificó de "chapuza" el plan de choque del PP. "Esa no es la solución y puede costarnos mucho dinero", dijo. Botella señaló que Sanidad debería establecer, junto con los sindicatos, una serie de baremos para incentivar a los facultativos que trabajen en jornada de tarde para reducir las listas de espera. "El consejero debería explicar qué tiempo considera aceptable para que determinadas patologías estén en espera y sobre todo debe decir a los ciudadanos qué precios está manejando con las clínicas privadas", añadió.
CC OO, por su parte, tildó de "irresponsables" las palabras del consejero, ya que recurrir a la "panacea" de solucionar el problema de las listas con hospitales privados "pone en peligro el mantenimiento y la mejora del sistema sanitario público". Pese al anuncio de que la medida será "gratis total" para los enfermos, CC OO entiende que tendrá como coste de oportunidad, ante unos presupuestos fijos, el recorte de partidas destinadas a la atención de otros pacientes.
Todos coinciden en considerar precipitada la medida, que justifican por la comparecencia prevista para hoy en las Cortes valencianas del presidente de la Generalitat, Eduardo Zaplana, para dar cuenta de las listas de espera hospitalarias.
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