Luis Racionero rescata todo el sueño del Renacimiento en su última novela, 'La cárcel del amor'

Luis Racionero (Seu d'Urgell, Lleida, 1940) decidió escribir La cárcel del amor la tarde que descubrió la tumba de César Borgia recorriendo el Camino de Santiago. La novela con la que ganó el Premio Azorín de novela -convocado por la Diputación de Alicante y la editorial Planeta-, dotado con 10 millones de pesetas, narra las aventuras, intrigas y amores de la familia Borgia. EL autor de El Mediterráneo y los bárbaros del Norte explicó ayer en la presentación de la obra en Madrid que hay bastantes analogías entre la Europa actual y la Italia de finales del siglo XV. "A la Europa del siglo XX la han cercado colosos como Rusia, Estados Unidos y China, y, si no sabe unirse y formar una entidad política única, será devorada por ellos", aseguró el autor, quien recalcó que la diversidad cultural y política puede ser un cauce de acrecentamiento del patrimonio de los pueblos.Racionero, que es autor de otras obras históricas, explicó que escribíó La cárcel del amor sin tratar de hacer ninguna tesis, aunque al final sí le ha salido.

"La escribí para divertirme y el resultado es esta obra de intrigas y aventuras que en ningún caso debe ser tomada por un ensayo".

Terenci Moix, que estuvo entre los miembros del jurado que dieron el premio a La cárcel del amor, actuó también como presentador de la novela. Recordó que él y Luis Racionero son vecinos de masía en el Ampurdán y aje ha determinado, que ese país, en parte, la obra de ambos. Se refirió Moix a la costante catalana de aproximación a Italia y a las influencias de Josep Pla, maestro de ambos, en esta última novela de Racionero. Para recalcar su admiración por el fallecido escritor catalán, citó la frase de Pla recogida en sus Cartas de Italia, en la que sostiene que hay tres cosas fundamentales en la vida: "El amor filial, dos o tres versos de Dante y la pasta italiana".

Racionero, que escuchaba sonriente las explicaciones de su amigo, asentía con un puro en la mano a cada frase del escritor, pero se sintió especialmente complacido cuando le escuchó decir que, a esa mirada hacia Italia heredada de Pla, Racionero le había añadido su impronta anglosajona. "Se tata de un Racionero muy implantado en Oxford, pero capaz de rescatar todo el sueño del Renacimiento. La historia está narrada por un doble de César Borgia, y a través de ella asistimos a una descripción completamente matemática en la que los hechos van creando un conglomerado fascinador".

Recordó también Moix que les personajes de La cárcel del amor son el mejor reparto del año: "Están todos, el cretino Savonarola, el genio de la diplomacia que fue Maquiavelo y mujeres deslumbrantes y perversas del Renacimiento", explicó.

Lucia Bosé, que también ofició como presentadora, aseguró que el secreto de la obra es descubrir hoy "que nos parecemos tanto a ellos como ellos quisieron parecerse a nosotros. Hemos cambiado la ropa, pero las costumbres y el apasionamiento son los mismos". Lucía Bosé comentó también que calificaba a los Borgia como personajes plenamente actuales. "Son una mezcla de valencianos, catalanes y la mala leche italiana", precisó.

La novela se inicia con una cita de Leonardo da Vinci: "Si la libertad te es querida, ojalá no descubras nunca que mi rostro es la cárcel del amor". La cárcel del amor transcurre durante el pontificado del papa Borgia Alejando VI (1492-1503), periodo en el cual el esplendor del Renacimiento alcanzó su punto máximo y comenzó a declinar por las invasiones de franceses y españoles, que acabarían con las ciudades-estado italianas.