Vázquez anuncia que criticará el pacto PP-CiU al margen del PSOE

Los socialistas gallegos están en guardia ante el inminente pacto del PP con Convergència i Unió (CiU). Su secretario general, Francisco Vázquez, dijo ayer que de momento no quiere "interferir" en las negociaciones para la formación del nuevo Gobierno, pero dejó bien claro que no se morderá la lengua ante los perjuicios que, según él, puede ocasionar a la comunidad gallega el pacto del Partido Popular con Convergéncia i Unió. Vázquez anunció que no se someterá en esta cuestión a consignas partidarias. "El PS de G será intransigente en la defensa de Galicia", afirmó, "al margen de la postura del PSOE, que no nos preocupa".El comité nacional de los socialistas gallegos, que ayer se reunió en Santiago para analizar los resultados electorales, dedicó buena parte del debate a examinar un informe sobre las posibles repercusiones en Galicia del pacto PP-CiU. El secretario de los socialistas gallegos recordó que él mismo ya fue muy crítico con el nacionalismo catalán incluso durante la etapa en que sostuvo al Gobierno de Felipe González y, según dijo, de ahora en adelante se sigue sintiendo legitimado para actuar "en defensa de una política de Estado".

Nacionalismo insolidario

Vázquez apuntó que Galicia, llegado el caso, debería hacer frente común con comunidades como Andalucía y Extremadura en contra de las exigencias del "nacionalismo insolidario".El primer peligro para su comunidad que intuyen los socialistas gallegos es el posible acuerdo sobre la financiación autonómica. Al igual que el presidente de la Xunta, Manuel Fraga, el dirigente del PSOE se opone frontalmente al traspaso del 15% del IRPF, "y por supuesto", insistió, "mucho más al 40% del que se está hablando ahora".

Vázquez, alcalde de La Coruña y ex-presidente de la Federación Española de Municipios y Provincias, también defendió que cualquier acuerdo sobre corresponsabilidad fiscal debería incluir a los ayuntamientos. En caso contrario, sostuvo que se corre el riesgo de fomentar un "nuevo hipercentralismo autonómico". '

El líder del PSOE gallego auguró que el futuro pacto entre José María Aznar y Jordi Pujol va a crear "graves contradicciones" a Fraga, por lo que se atrevió a pronosticar que el presidente de la Xunta adelantará al otoño o como muy tarde a la próxima primavera las elecciones autonómicas que en principio deberían celebrarse a finales de 1997.

Vázquez tiene tan pocas dudas de que Fraga volverá a encabezar las listas del Partido Popular gallego que se permitió un comentario sarcástico: "En los próximos meses vamos la asistir a declaraciones espontáneas de la Asociación de Remeros de la Ría de Arousa o de la cofradía de San Benito rogándole que se presente", dijo.