PP y CiU alcanzan su acuerdo con el reparto de las Mesas del Congreso y el Senado

Partido Popular (PP) y Convergència i Unió (CiU) alcanzaron ayer un primer acuerdo en lo que se prevé una larga negoación: la composición de las Mesas del Congreso de los Diputados y el Senado. Joaquim Molins, en nombre de los nacionalistas catalanes, se comprometió ante el representante M PP, Rodrigo Rato, a apoyar que las presidencias M Congreso y del Senado sean para los populares, a cambio de una composición plural en las Mesas de ambas Cámaras. Este acuerdo es compartido también por Coalición Canaria (CC) y el Partido Nacionalista Vasco.

El portavoz de los nacionalistas vascos en el Congreso, Iñaki Anasagasti, dio ayer el visto bueno a Rodrigo Rato. El d 1gente del PP no quiso confirmar tras la reunión el nombre de Federico Trillo, al que se da por virtual presidente del Congreso. La razón de fondo es que los socialistas ponen trabas a este nombramiento, y Molins y Rato pretenden una solución de consenso para la Mesa.El PP no parece dispuesto a forzar tanto el consenso como para prescindir de su candidato. El polémico nombramiento encontró en Rato una excusa formal: "No me compete sólo a mí tomar esa decisión". Sin embargo, fuentes de ambas formaciones daban ayer como muy probable la elección de Trillo, tras el acuerdo de los nacionalistas catalanes.

La Mesa del Congreso tendrá, por tanto, un presidente del Partido Popular, y las cuatro vicepresidencias se las repartirán, previsiblemente, una el PP, dos el PSOE y una CiU. El reparto de las cuatro secretarías está en el aire. Según las cuentas del PP y CiU, en estas plazas tendrían cabida un representante del PSOE, otro del PP, uno del PNV y otro de IU, que accedería a ella con el consentimiento de los socialistas. Pero el PSOE se ha apresurado a advertir que no cederá a IU esa secretaría si el presidente del Congreso es Trillo y también se plantea vetar alguno de los nombres barajados como representantes de Izquierda Unida en la Mesa.

Coalición Canaria se quedaría fuera de este reparto, pero tendría representación en la Mesa del Senado, cuyo presidente pertenecerá también al PP. Según fuentes consultadas por este periódico, la Cámara alta estaría presidida por José Miguel Ortí Bodás, anterior vicepresidente del Senado.

La reunión de ayer fue una manifestación clara de que la negociación será larga. Una vez resuelta la composición de ambas cámaras, que se elegirán el día 27, todas las cuestiones a negociar quedan abiertas. La cuestión autonómica, en su vertiente de transferencias y de financiación, fue la parte del león de una reunión que duró dos horas. Nadie quiso comprometerse a una perspectiva de acuerdo y mucho menos a cantar victoria ante lo que no fue más que el comienzo de una larga negociación.

"Es necesario entender que la duración de la negociación excede a la propia sesión de investidura", dijo el portavoz de CiU, Joaquim Molins al terminar la reunión. Molins también quiso tranquilizar a la opinión pública ante los plazos de una sesión de investidura cuya celebración aún no es posible vislumbrar. "No vayamos a ahogarnos con unos plazos que no apremian", señaló.

Molins, que no quiso revelar el contenido de la conversación con Rato, ni siquiera las perspectivas de avance, se limitó a resaltar el cambio que se ha producido en las relaciones entre el PP y CiU tras la entrevista del pasado fin de semana entre José María Aznar y Jordi Pujol. "Hay que hacer constar que se están produciendo aspectos positivos, como el cambio de lenguaje. Las cosas ya no son iguales desde el pasado fin de semana".

El acercamiento entre los nacionalistas catalanes y los populares está teniendo consecuencias en las relaciones de los convergentes con los socialistas, socios parlamentarios en la anterior legislatura. Molins ironizó ayer con la "actitud constructiva" que están adoptando los socialistas ante las conversaciones entre CiU y el PP. Se refería a la reciente intervención en Linares del presidente del Gobierno en funciones, Felipe González, en la que éste pronosticó al futuro Gobierno del PP dos años de mandato y dio por iniciada ya la campaña para las próximas elecciones.