La guerrilla de las FARC mata a 11 policías en un pueblo colombiano
Once policías destacados en una pequeña población del Caribe colombiano murieron en un ataque feroz de dos comandos de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC)., No fue un hecho aislado. Las autoridades calificaron de "ofensiva de la narcoguerrilla" una serie de acciones terroristas en el país.El hecho más grave ocurrió en Chalán, un caserío de la provincia de Sucre al norte del país. A las siete de la tarde comenzó el ataque guerrillero. Los 11 policías resistieron hasta la medianoche, pero poco pudieron hacer ante la clara ventaja, en número de hombres y en armas, de los insurgentes. La sede de la policía -siempre pobre en estas zonas alejadas- quedó completamente destruida.
Los guerrilleros se llevaron material de guerra y equipos de comunicación. El subdirector de la policía, Luis Enrique Montenegro, en conferencia de prensa en Bogotá no dudó en arremeter contra la población. "Ellos sabían del asalto guerrillero y no fueron capaces de informar", dijo visiblemente indignado. Calificó de "cómplices" a los habitantes y habló de la posibilidad de retirar a la policía. "O están con ellos o con nosotros", dijo.
Ésta es la difícil situación de los campesinos pobres que viven en las zonas dominadas por la guerrilla. Están entre dos fuegos. Para el Ejécito son cómplices de los insurgentes y éstos los condenan por soplones si dan información a los uniformados. Poco se ven los efectos de la ratificación, hace apenas un mes, del Protocolo II de Ginebra que habla del respeto a la población civil en los conflictos armados.
Lo ocurrido es para muchos una prueba más de la ingobernabilidad del país. La negociación con los dos grandes grupos insurgentes está ralentizada por la crisis generada a raíz de la denuncia de ingresos de dinero del narcotráfico en la campaña presidencial. Al inicio de su mandato, el presidente Ernesto Samper hizo una propuesta audaz para poner punto final a esta larga guerra. Todo se fue al traste. El ELN abiertamente ha dicho que no negocia con un "narcogobierno". Para las FARC es una pérdida de tiempo hablar con un Gobierno deslegitimizado.
Además fue asesinado el jefe de la policía de Puerto Rico, población en la selva amazónica; igual suerte corrió el director de la policía secreta en el puerto petrolero de Barranca, en el centro del país; otro uniformado resultó herido en un ataque en la población de Miraflores, también en la Amazonia y tres autobuses fueron incendiados en Bogotá.
