Los obispos de Portugal y Austria admiten el condón contra el sida

La calificación esta semana, en un documento de la Conferencia Episcopal francesa, del uso del preservativo como "necesario" para prevenir el sida, sigue provocando reacciones contrapuestas en el seno del catolicismo. La Iglesia portuguesa admitió ayer, aunque sin modificar su posición de fondo, la posibilidad del empleo profiláctico del condón. Incluso el presidente de la comisión episcopal portuguesa de la Doctrina de la Fe, Antonio Monteiro, habló de "recomendar" el preservativo "a las personas que, infectadas por el virus, no están dispuestas a abstenerse de relaciones sexuales".Monteiro, invoca la doctrina ordinaria de la Iglesia del "mal menor", en lo que constituye un cambio claro desde que en 1992 la Conferencia Episcopal portuguesa se alineara con las tesis del Vaticano en materia de sexualidad y contracepción.

"Moralmente condenable, su uso es un mal menor" dice Monteiro del preservativo, "principio que la Iglesia siempre ha defendido. Pero, cuando se trata de personas infectadas por elvirus del sida, conviene recomendar su uso (..), pues se trata de proteger otras vidas o las de quienes van a nacer, lo que es mucho más importante que la simple rectitud moral en la sexualidad".

No es dogma

En Austria, el obispo de Innsbruck, Reinhold Stecher, señaló ayer que la prohibición del preservativo no es un "problema del ámbito del dogma", y que se podría permitir en países con un elevado índice de afectados por el sida."Hay que pensar en lo que se exige a un matrimonio cuando uno de los dos está enfermo de sida" dijo Stecher. Según el obispo, quien tenga el valor para exigir abstinencia sexual a esas parejas y considere el incumplimiento de este precepto como un pecado grave, "debe poder probar de manera clara dónde y cuándo pronunció Dios tal prohibición o de qué indicación divina se deriva semejante exigencia, que raya en lo imposible humanamente".

El Observatorio Europeo de las Drogas y las Toxicomanías (DEDT) ha manifestado: "en situación de riesgo, una relación protegida es preferible a un contagio mortal".

Por otra parte, las autoridades indonesias han distribuido gratis preservativos en las estaciones ferroviarias y de autobuses de la capital, Yakarta, con ocasión del gran éxodo de ciudadanos que parten a sus poblaciones de origen para la fiesta del Id, final del Ramadán. En ese mes, que termina el próximo día 20, los musulmanes deben abstenerse de comer, beber y tener relaciones sexuales desde la salida a la puesta del sol.

También la secretaría de Salud de Río de Janeiro ha instalado 50 máquinas de condones coincidiendo con las fiestas de carnaval. Brasil es el cuarto país en casos de sida .