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MAGNICIO EN ISRAEL

Del pesar de Arafat al júbilo de los radicales palestinos

Los dirigentes árabes y la Autoridad Nacional Palestina que han firmado acuerdos de paz con Israel estaban anoche conmocionados por el asesinato del primer ministro de Israel, Isaac Rabin. Pero Siria guardó silencio e Irán no pudo ocultar su alegría, al igual que los palestinos radicales que expresaron su júbilo en sus campamentos en Líbano.Tanto el presidente egipcio, Hosni Mubarak, como el rey Hussein de Jordania y el presidente de la Autoridad Nacional Palestina (ANP), Yasir Arafat, han manifestado su intención de asistir al entierro de Rabin, previsto para el mediodía del lunes, y expresado su esperanza en que la muerte de ese líder de la paz" no interrumpa el proceso. Arafat, principal interlocutor de Rabin desde 1993, manifestó desde su cuartel general en Gaza, su profunda tristeza y pesar, al conocer "ese atroz crimen contra un gran dirigente de Israel y un artífice de la paz.". "Espero que podamos superar esta tragedia que ha golpeado tan duramente al proceso de paz", añadió.

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En El Cairo, el presidente Mubarak deploró la muerte, bajo las traidoras balas de los enemigos de la concordia, de un líder como Rabin que tanto trabajó por conseguir para su pueblo y los otros pueblos de la región la seguridad y la paz tras largas guerras".

Mubarak recordó qué "varios hombres de principios han sacrificado su vida por la paz" para hacer un paralelismo entre el asesinato de su predecesor Anuar el Sadat, muerto en 1981 por integristas islámicos por haber sido el primer dirigente árabe en firmar el reconocimiento de Israel en 1979, y el magnicidio de Tel Aviv.

En Jordania, el ministro de Exteriores, Abdel Karim Kabariti, calificó de "trágico y estremecedor" el asesinato y señaló: "El proceso de paz debe continuar y no debemos dejar a terroristas y fanáticos que nos impongan el curso de los acontecimientos". Jordania ha sido el segundo país árabe, tras Egipto, en firmar la paz con Israel en octubre de 1994. Siria, cuyo proceso de negociación de un acuerdo de paz con Israel se encuentra bloqueado, informó anoche del asesinato de Rabin, pero sin hacer el menor comentario.

Los sentimiento de pesar tenían su contraste con las manifestaciones de alegría en Irán y en los campamentos de los radicales palestinos en Líbano. La agencia oficial iraní IRNA afirmó anoche que "Rabin ha pagado con su propia moneda. Rabin fue un ardiente defensor del terrorismo de Estado". En Líbano, los radicales palestinos se echaron a la calle en sus campamentos y acogieron con gritos de alegría y disparos al aire el magnicidio.

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