El jardinero Kalanke no es machista
, El ingeniero de jardinería Eckhardt Kalanke, de unos 60 años, recibió ayer con alivio y alegría" la sentencia del Tribunal Europeo de Luxemburgo que le da la razón en su demanda contra la decisión de elegir una mujer para el cargo de jefa del departamento de jardinería de la Ciudad-Estado de Bremen, aunque, según él, no estaba mejor preparada, sino por razón de su sexo fenino. Kalanke manifestó ayer en la televisión privada RTL su "intención de no jubilarse y volver a solicitar el puesto" que se le negó.
Todo se remonta al año 1991, cuando se sacó a concurso el puesto de director de de jardinería de la ciudad del norte de Alemania. Optaron por el puesto Kalanke y una mujer. El comité de personal de jardinería negó la conformidad para dar el puesto a Kalanke. Se acudió a una, entidad de arbitraje, que se pronunció por la candidata femenina, en base a la ley que prevé favorecer a las mujeres, en tanto estén menos representadas en los cargos directivos. La ley de igualdad de derechos del Estado de Bremen establece que se conceda una cuota de puestos directivos a mujeres.
Kalanke, casado y con dos hijos de casi 30 años, tiene el pelo y bigote blancos y da sensación de timidez. Su abogado, Karsten Kuehne, comentó a este periódico que Kalanke "no tiene absolutamente nada que ver con la imagen de un tipo machista" y lo único que hizo ha sido luchar por sus derechos. El abogado aseguró que Kalanke no tiene nada contra las mujeres y calificó de exageradas las interpretaciones que han dado muchas mujeres a la sentencia de Luxemburgo.
Con la decisión de no concederle el puesto directivo al que aspiraba, Kalanke sufrió un perjuicio económico y en su carrera administrativa al no ascender al puesto deseado. A través de su abogado, Kalanke entregó en -Bremen, una declaración a la prensa en la que afirma que la Administración del Estado de Bremen le había discriminado por razón de su sexo, al aplicar la ley que establece la igualdad de los sexos de una manera formal, "sin considera ción a su situación persobal, en contra de un padre de familia experimentado profesionalmente".
Kalanke manifestó que él "se muestra abierto a los intereses de la mujer como grupo social" y añade que durante el procedimiento no se había manifestado "para no perjudicar la objetividad necesaria". El abogado declaró que "la problemática del caso reside en la necesidad de respetar la igualdad de oportunidades individuales en los tiempos en que se fomenta la igualdad de derechos del sexo femenino".
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