González pide que no le "empujen"

Felipe González dio a entender ayer que, si a finales de octubre los Presupuestos Generales del Estado para 1996 son devueltos al Gobierno, se tomará un breve tiempo de reflexión y a continuación disolverá las Cortes.

No especificó la duración de esa pausa, pero sorprendió que por vez primera no insistiera, como hasta ahora, en que las elecciones serán en marzo.

González concluyó ayer en Líbano su gira por cuatro países de Oriente Próximo y Gaza y llegó alas 19.30 a Madrid. Fue el primer jefe de Gobierno occidental en visitar Beirut desde que en 1975 estalló una guerra civil que duró 17 años.

En la rueda de prensa que dio en el palacio de Baabda con el primer ministro libanés, el magnate Rafic Hariri, aceptó con una amplia sonrisa las preguntas de política interior. Este súbito buen humor sólo parecía explicable por los Positivos datos económicos que acababan de comunicarle desde Madrid.

El 18 de julio, el presidente del Gobierno afirmó que, si carecía de apoyo para sacar adelante los Presupuestos, disolvería las Cortes porque no estaba dispuesto a gobernar en minoría. ¿Cuando tomará la decisión de disolver? "Cuando llegue el momento, contestaré" respondió. "Será el 25 o 26 de octubre", dijo, en alusión a la fecha del debate parlamentario sobre, los Presupuestos. ¿Será en esos días cuando anunciará la disolución?, se le volvió a preguntar. "...O al día siguiente. No empujen", concluyó.

Sin perder la sonrisa, González contestó a una pregunta sobre su receptividad ante las presiones de Pujol, que reclama elecciones generales inmediatas para celebrar las catalanas en primavera. Confesó que es un político "básicamente blando", pero recordó en tono más serio: "Creo que el derecho a disolver lo tiene el presidente del Gobierno".