Indignación en Valencia y Salamanca

La decisión del Gobierno ha provocado indignación y marlestar en Valencia, Salamanca y Barcelona. La alcaldesa de Valencia, la popular Rita Barberá, arremetió ayer contra el Gobierno socialista, no tanto por elegir a Santiago de Compostela sino por no designar la capital mediterránea como aspirante española a la capitalidad europea de la cultura en el 2001.Barberá rechazó las explicaciones oficiales del Gobierno: "El cambio de normas para elegir la capital europea de la cultura en el 2001 no afectaba a la soberanía del Gobierno para designar a su candidata". La alcaldesa del PP dijo que el Ejecutivo no ha querido pronunciarse sobre la candidatura del 2001, porque para ese año optan las ciudades de Valencia y Barcelona y "el Gobierno no tiene la fortaleza suficiente para decidir por sí solo".

"Hemos recibido muchas desconsideraciones", continuó Barberá, "es como si el Gobierno quisiera taponar las expectativas y el futuro de Valencia, creo que el Ejecutivo no puede esperar nada de esta ciudad con el trato que le ha dado".

El alcalde de Salamanca, Julián Lanzarote (PP), ha señalado que la decisión del Gobierno se relaciona con las carencias en materia de infraestructuras que se suponen en esta ciudad, porque, en otros aspectos, Salamanca. "no tenía que demostrar nada, ya que sus valores son suficientemente conocidos", informa Ignacio Francia. El sentir general recogido en ámbitos culturales era ayer de indignación, ya que, según se señaló, "aquí jamás se hará inversion, ni siquiera en lo que es la especialidad de Salamanca, la cultura y la educación".

Barcelona, desconcierto

"Estamos desconcertados porque no se han cumplido las reglas del juego establecidas por el Ministerio de Cultura de elegir el 30 de junio una ciudad española entre las que se presentaban para la capitalidad cultural de los años 2000 y 2001", aseguró ayer Ferran Mascarell, director de la candidatura de Barcelona para el 2001.

Todo lo que hemos realizado hasta ahora no irá a parar a la papelera. Si hemos trabajado para tener la candidatura con el mejor dossier el 30 de junio, ahora trabajaremos para que el dossier de Barcelona sea el más convincente de cara a la decisión que deberán tomar el 30 de noviembre", dijo Mascarrell.

El director de la candidatura considera injusto que las ciudades que optaban para el 2000 no seleccionadas presenten ahora candidatura para el 2001. "Es injusto que se cambien así las reglas establecidas previamente. Barcelona es una ciudad que por razones históricas siempre le ha costado más convencer. Pero esto es un estímulo".