Buenos, simpaticos chicos

Bravos muchachos: hacen una representación escolar, como una fiesta de fin de curso, y están por encima de esos límites. Un idioma inglés bien masticado, clarito -usted no lo entiende bien: es que no sabe usted inglés-, respetuoso para con su lejano maestro, el Bardo -ayer se supo que era bastante calvo y tenía un grave tumor en el ojo izquierdo-, en lo que se refiere al texto, juguetones con las combinaciones de trajes y épocas, del añadido de alguna tonada y de una canción de borrachos españoles, con una buena unidad en la actuación y el humor que correspondía al propio Shakespeare, más el de nuestra época.Este workshop, o taller, da cursos de teatro inglés para jóvenes, y de teatro musical; pretende instalarse en el teatro Pavón -feudo, en otro tiempo, de Celia Gámez; hoy, abandonado para mantener tres compañías permanentes: una de repertorio, otra escolar de su propia compañía, de taller para que los alumnos interpreten. Quieren tener café teatro, jazz, exposiciones, bares y muchas cosas. Que tengan suerte.