El jefe de la policía secreta de Pinochet advierte que no aceptará ir a la cárcel

El general retirado Manuel Contreras, jefe de la policía secreta chilena durante la dictadura de Augusto Pinochet, advirtió, a través de su hijo, no aceptará ir a prisión aunque así lo disponga la Corte Suprema, que a principios de esta semana emitirá el fallo definitivo sobre la muerte de Orlando Letelier, ministro de Exteriores de Salvador Allende, asesinado en Washington hace 19 años.

Manuel Contreras, 33 años, anticipa un enfrentamiento armado en la finca El Viejo Roble, al sur de Chile, donde su padre aguarda la sentencia con una guardia del Ejército y otra privada. "Juró, como soldado, morir peleando y si el fallo sale muy malo, no va dejar que le lleven a la cárcel. Él dijo que no va a estar un día en la cárcel".Los magistrados de la Cuarta Sala de la Corte Suprema deben ratificar o modificar el fallo de primera instancia dictado por el juez Adolfo Bañados, que condenó a Manuel Contreras a siete años de cárcel y al brigadier Pedro Espinosa, en activo, segundo entonces en el mando de la DINA (Dirección de Inteligencia Nacional), a seis años. Si el Supremo confirma las penas, deberán cumplirse en un recinto carcelario, pero si quedan reducidas a menos de cinco años el tribunal puede decidir que los dos reos se acojan al régimen de libertad vigilada. La absolución ha quedado prácticamente descartada en una sentencia cuyo borrador ocupa 26 páginas y ha sido adoptada por unanimidad, según el magistrado Eleodoro Ortiz.El Gobierno asegura que las Fuerzas Armadas acatarán el fallo y no hay peligró alguno de golpe, pero fuentes oficiales admiten en privado su temor a la reacción de Contreras y sus incondicionales caso de ratificar la Corte Suprema las conclusiones de primera instancia. Todavía tiene cierta influencia en algunos sectores del Ejército. No sería extraño que encontrara a 40 personas dispuestas a morir con él", comenta un parlamentario con vínculos militares.Juan Bustos, abogado querellante en el caso Letelier, piensa que, las declaraciones de Manuel Contreras junior son las propias de un hijo. "Le es prácticamente imposible asumir que su padre es culpable y que, consecuentemente, va a ser condenado". Bustos descarta un choque a tiros. "Es muy difícil que se produzca un enfrentamiento, porque ¿quiénes van a seguir en una cosa así a una persona cuando hay una orden de la justicia? Es totalmente impensable hoy en Chile que haya un grupo que puede planteárselo desde esa perspectiva".Dispuesto al holocausto

Manuel Contreras hijo, quien se manifiesta dispuesto al holocausto junto a su progenitor, habla con su padre dos o tres veces al día. La última vez le dijo: "¿Me ves intranquilo?". No, le contesté. 'Entonces quédate tranquilo', me pidió. Mantengo mi postura de permanecer bien, frío, sereno, y todo lo que he dicho lo mantengo". La posibilidad de un suicidio también fue manejada. "Tengo miedo de que te puedas pegar un tiro. Y él me repondió derechamente: 'Tengo dos caminos'. No me dijo cuáles. Le dije ¿me lo juras? 'Te lo juro'. No creo que se autoelimine. Creo más probable el enfrentamiento (...) Prefiero verlo pelear que muerto y humillado en la cárcel. Él sabe también que en la cárcel lo van a matar, aunque esperen tres años". Las convocatorias a la calma y el acatamiento se suceden, porque a nadie se le escapa la trascendencia de la sentencia, que por primera vez afecta a la cúpula más detestable del régimen militar. Influyentes generales en retiro han descartado una alteración del orden constitucional, pero las manifestaciones de otros jefes con mando de tropas continúan siendo ambiguas, cuando no equívocas e inquietantes.