Se inaugura en Gijón una muestra sobre la romanización del norte de España

La exposición Astures pueblos y culturas en la frontera el imperio romano, inaugurada ayer por la reina Sofía en Gijón (Asturias), permitirá "corregir una visión errónea de la historia", según la cual la romanización en el norte de la península "ha sido infravalorada o incluso negada por la bibliografía al uso", en expresión de la comisaria de la muestra, la arqueóloga Carmen Fernández Ochoa. Culminación de diez años de excavaciones arqueológicas en Gijón, Astures pretende ser, según sus organizadores (el Ayuntamiento de la ciudad, el Principado de Asturias y Caja de Asturias), el "acontecimiento cultural del año en el norte de España".Más de 200.000 personas se pretende que visiten durante los siete próximos meses esta ambiciosa exposición, que ocupa más de 10.000 metros cuadrados, repartidos en cinco emplazamientos, y en la que, de forma muy didáctica, se reconstruye la cultura, el hábitat, los medios de subsistencia y la vida cotidiana de las tribus astures antes y después de su romanización.

La exposición muestra el acopio de los vestigios arqueológicos recuperados al cabo de una década de excavaciones en la ciudad y las aportaciones de otras piezas fundamentales cedidas por museos e instituciones de Asturias, León y Zamora, territorios por los que se extendían los antiguos astures.Termas romanas

Uno de los recintos ha sido dedicado monográficamente a las explotaciones auríferas que los romanos llevaron a cabo en el territorio de los antiguos astures. También se podrán visitar los restos que se conservan de las termas romanas de Gijón, consideradas como "uno de los más significativos monumentos romanos del norte de España", según Fernández Ochoa.

Según la comisaria de la muestra, las excavacaiones realizadas tanto en la Campa de Torres (un promontorio abierto al océano y con dominio visual sobre la ciudad, el litoral asturiano y la cordillera cantábrica, y que constituye el primer vestigio de poblamiento humano en Gijón, previo a la dominación romana), como en las termas del Campo Valdés, "permiten corregir la falsa creencia de una débil romanización del norte de Hispania. Estos territorios sufrieron un proceso similar a otras zonas de la península ibérica, con la única diferencia de que su conquista se produce cien años más tarde".

La exposición ha dispuesto de un presupuesto de 150 millones de pesetas, y a ello se suman los 1.200 millones que el Ayuntamiento de Gijón ha invertido en la reconstrucción de la Torre del Reloj y en las excavaciones de la Campa de Torres y las termas, que se mantendrán como equipamientos permanentes con sus actuales contenidos una vez que se clausure, el 30 de septiembre, la exposición. Junto a estos emplazamientos, Astures ocupa también el Instituto Jovellanos y la colegiata del palacio de Revillagigedo.