Bofarull renuncia al Premio Josep Pla por los cambios de criterio del jurado
Manuel Bofarull, uno de los dos ganadores del Premio Josep Pla de narrativa en catalán -que se falló el pasado viernes en Barcelona-, anunció ayer su decisión de renunciar a él a causa de las irregularidades registradas. El jurado del Pla optó el viernes por premiar con igual mérito a Manuel Bofarull e Isabel Olesti, a pesar de que en una votación anterior, el miércoles, Bofarull había resultado ganador por tres votos a dos. Las irregularidades desembocaron el jueves en la dimisión de Joan Perucho como miembro del jurado.La votación del viernes arrojaba un resultado de dos votos para Figures vora un rec, de Manuel Bofarull, y dos para Retrat de dona amb ocell blanc, de Isabel Olesti. Las bases del premio, sin embargo, no permitían ni el empate ni compartir el premio. Solución: se cambiaron dos bases y se proclamó como ganadores con igual mérito a ambos.
"Supe por televisión el viernes por la noche que habían decidido repartir el premio entre dos autores", explicaba ayer a este diario Bofarull, "pero a las doce del mediodía
[de ayer] aún no me había llamado nadie de la editorial. Ha habido cosas raras en el premio: una votación anulada, convocatoria de nuevas reuniones... Al final he decidido renunciar, y así se lo he comunicado al editor".
Andreu Teixidor, editor de Destino, manifestó ayer que conocía la decisión de Bofarull, pero que todo quedaba pendiente de una reunión que ambos debían celebrar mañana. Bofarull comentó: "Iré a la editorial a saludar a Teixidor, pero mi decisión de renunciar al premio está tomada".
Cuestión ética
Manuel Bofartul, de 71 años, manifestaba ayer: "Todo es bastante kafkiano, ha habido demasiadas irregularidades". "Me sabe mal por el prestigio del premio", añadió, "pero la verdad es que lo han llevado todo bastante mal. Renuncio por una cuestión ética".
Joan Perucho se sorprendía ayer de que el jurado hubiera cambiado el último día las bases del premio. "Que lo hubieran hecho para el futuro, vale", comentaba, "pero el mismo día...". "Para mí, el premio estaba dado desde la votación del miércoles", añadió. "Aunque no se hubiera firmado el acta había un pacto entre caballeros. Es algo muy raro que haya dos ganadores y la renuncia de Manuel Bofarull me parece muy digna. La decisión de que compartiera el premio era humillante para él".
Andreu Teixidor, sin embargo, insistía ayer en que no había habido nada raro en la votación del Josep Pla. "El premio se da el último día", declaró, "y lo que pasó el miércoles fue sólo una votación orientativa, no definitiva". Para reforzar su criterio, comentaba Teixidor que en 1947, cuando Miguel Delibes ganó el Nadal, su padre, Joan Teixidor, descubrió la obra ganadora, La sombra del ciprés es alargada, el último día e hizo que la leyeran en una noche los restantes miembros del jurado. "Acabó imponiéndose por tres votos a dos, lo que demuestra que hasta el último día no hay nada decidido'', concluía.
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