La OMS pide a las familias que se impliquen en primera línea en la lucha contra la enfermedad

La Organización Mundial de la Salud (OMS) lanza hoy como lema del Día Mundial del Sida la idea de Sida en familia, en un intento de implicar de lleno a las primeras células de la sociedad en la lucha contra una enfermedad que, según datos de la OMS, ha contagiado a 16 millones de personas en el mundo en la última década. "Una familia que funciona bien", dice el comunicado de la OMS, "que vela por su propio bienestar y que se comunica abiertamente entre sus miembros es la primera línea de defensa contra el VIH, y una importante fuente de cuidados y apoyo en caso de padecer sida".Investigadores de 42 países y representantes gubernamentales y de instituciones internacionales inician hoy en una cumbre que pretende coordinar todas las políticas parciales sobre el sida, con objeto de combatir la enfermedad con más eficacia. "La lucha en el ámbito mundial", dijo Jean-Baptiste Brunet, un veterano de la OMS, "es absolutamente inseparable del problema del subdesarrollo". El director general de la OMS, Hiroshi Nakajima, tuvo ayer palabras de ánimo: "Al afrontar tan formidable y urgente tarea es absolutamente esencial unir a toda la gente empeñada, todos los recursos y todos los conocimientos científicos. Podemos vencer a esta enfermedad. Científicos, si juntamos nuestro saber, venceremos a esta enfermedad". También Jean Luc Montagnier, el investigador del Instituto Pasteur que identificó el virus del sida, se mostró optimista: "Confío en que pronto contemos con tratamientos capaces de estabilizar la infección".

España está representada en la cumbre por el ministro de Educación y Ciencia, Gustavo Suárez Pertierra, y el secretario del Plan Nacional del Sida, Francisco Parras.

La cumbre intenta paliar el fracaso reconocido del plan de lucha contra el sida de la OMS. Corren malos tiempos para esta organización, tras la crisis económica internacional y el aumento de las operaciones de urgencia a las que han tenido que hacer frente los países donantes. Todo esto ha mermado en 10 millones (le dólares el presupuesto del programa para este año, que no alcanzará los 140 millones necesarios, informa Ana Fernández.

La nueva realidad impuesta por la propagación del sida -con algo más de 985.000 enfermos en el mundo-, y las consecuencias socioeconómicas que acarrea, arrancaron hace dos años de las manos de la OMS el control exclusivo de tan importante programa sanitario.

El 1 de enero de 1996 nacerá el programa conjunto de la ONU, con la participación de seis agencias internacionales. Además de la OMS, el Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), el Fondo para la Infancia (Unicef), la Organización para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco), el Fondo para la Población (FNUAP) y el, Banco Mundial coordinarán los esfuerzos que hasta ahora han llevado por separado, y a menudo de manera superpuesta, con el consiguiente despilfarro de recursos humanos y económicos.

"No se trata de un fondo mancomunado de recursos, ya que existen demasiados intereses creados en el sistema para poder hacerlo", manifestó en Ginebra a este periódico el coordinador del grupo de preparación del nuevo programa, el diplomático sueco Nielsen-Arne Kastberg, que reconoce que "es un modelo dificil porque aumenta las variables de cosas que pueden ir mal, pero la comunidad internacional está cansada de que cada agencia barra para casa".

Pero la eficacia del nuevo programa, según Kastberg, "dependerá de la capacidad e interés de las personas que trabajen en el terreno".