El Vaticano y los países musulmanes se unen para defender el modelo tradicional de familia

ANA CAMACHO ENVIADA ESPECIAL, Enarbolando la defensa de la familia, Egipto estaba ayer al frente del bloque de países musulmanes que junto al Vaticano, y tras una breve tregua en torno al aborto, se pusieron en pie de guerra contra el Programa de Acción de la ONU sobre Población, que ayer entró en su sexto día de debate. La mecha la encendió el párrafo 7.2 del documento, referente a los derechos sexuales, la salud reproductiva, la información sexual a los adolescentes y el "derecho de parejas e individuos" a la planificación familiar. Borrar "individuos" y dejar sólo la mención al matrimonio era la consigna de los países musulmanes.

Las naciones musulmanas en bloque piden un lenguaje más exacto, que no deje dudas a que familia sólo hay una, la basada en la unión de un hombre y una mujer. Países occidentales y africanos tomaron las armas para hacer frente a la nueva ofensiva semántica que, tras la batalla del aborto, dicen, apunta ahora a los derechos de la mujer en las relaciones reproductivas.Los delegados de los países occidentales terminaron anoche la primera fase de los debates con un consenso transitorio pero sin llegar a acuerdos en los capítulos 2 y 7 y un párrafo del 10, que dejan para el plenario del lunes, tras el descanso formal de hoy. La mayor polémica se centró en las migraciones, con referencia a la "reunificación familiar" del capítulo 10.

En las 23 líneas del párrafo 7.2 se reconoce como "piedra angular de la salud sexual y reproductiva" el "derecho básico de todas las parejas e individuos a decidir libre y responsablemente el número de hijos, el espaciamiento de los nacimientos y el intervalo entre éstos, y a disponer de la información de medios para ello". Esta alusión está estrechamente ligada a una de las estrategias claves con que la ONU espera reducir las previsiones de crecimiento para el año 2015 de 7.920 millones a 7.270. Se basa, tal como: explica en el capítulo 7, en, "el suministro de información amplia y práctica, así como de una gama completa de servicios de atención de la salud reproductiva y sexual, incluida la planificación de la familia", a los 120 millones de parejas en el mundo que no tienen forma de acceder a anticonceptivos.

Además, el 7.2 advierte sobre la vulnerabilidad de los adolescentes por comportamientos sexuales de riesgo (uno de 20 jóvenes entre 12 y 19 años se infecta de sida cada año) y pide que se atiendan "las necesidades de los adolescentes en materia de enseñanza y de servicios para que puedan asumir su sexualidad de modo positivo y responsable".

Promiscuidad juvenil

El debate no es nuevo. Ya en las reuniones preparatorias que durante tres semanas se celebraron el pasado abril en Nueva York el Vaticano contó con el apoyo de Honduras, Guatemala, Nicaragua, Malta, Benin, Venezuela, Argentina y Marruecos, no se había alcanzado un consenso sobre estos términos y se había acusado a la ONU de querer fomentar la promiscuidad con. la ampliación a los adolescentes de los servicios de educación sexual. "Es una estratagema que está siendo utilizada por las delegaciones que se oponen al documento, para que no sea aprobado", dijo ayer Joaquín Arango, jefe de la delegación española, al subrayar que "todos los términos cuestionados no son nuevos y han sido definidos por organizaciones internacionales como la Organización Mundial de la Salud".

En uno de los diarios distribuidos gratuitamente en la conferencia la respuesta se disparó con bala al hacer constar las denuncias de que varias de las delegaciones centroamericanas "están infiltradas por el Opus Dei", por personas pertenecientes EL grupos provida que "reciben instrucciones del Vaticano". Las simpatizantes de estas organizaciones en el foro paralelo de ONG respondieron con panfletos que denunciaban a su vez, la abundante presencia en las delegaciones oficiales a favor del documento de miembros de su ONG, rival, International Parenthood Planning Federation, especializada en la planificación familiar.

Formas de familia

En el fragor de la batalla, el embajador holandés, Biegman, se declaró sorprendido en el frente abierto por la definición de familia con las objeciones impuestas contra el término "diversos conceptos de familia", que fue sustituido por fin por "formas de familia" y "otras uniones".

El ministro de Exteriores egipcio, Amr Mussa, declaró a última hora del viernes, que su delegación había mantenido una reunión con los representantes de otros países islámicos -entre ellos Indonesia, Pakistán e Irán- que dieron su apoyo a la exigencia de Egipto para- que se borre esta frase. A esta reserva se unieron el Vaticano, algunos países latinoamericanos y Alemania. El interés de los países islámicos por que no se dé cabida a las uniones de hecho, especialmente entre homosexuales, también pidió que se borrase el, término "individuos" y su sustitución por "parejas". "Ésta es una batalla que tienen perdida de antemano", dijo Biegman al subrayar que estos principios han estado vigentes en los documentos de la Conferencia desde la reunión de Bucarest en 1976.

En el foro paralelo de ONG, mujeres africanas objetaron las reservas del Vaticano y del bloque musulmán al derecho a una vida sexual "satisfactoria y sana" con el fin de dejar sentado, que no hay más relaciones que las de la pareja casada. Eka Williams, nigeriana y vicepresidenta de la So ciedad para Mujeres y Sida en África, hizo hincapié en que si se trataba de poner en entredicho algún tipo de familia ella se oponía. al modelo poligámico. "La familia poligámica multiplica por cuatro las posibilidades de contagio de la mujer por sida", dijo Willianis al recordar que para el año 2000 entre 38 millones y 110 millones de mujeres adultas padecerán el VIH.