¿Tiene Pyongyang la bomba atómica?

El desafío norcoreano está vinculado con una incógnita fundamental: ¿dispone ya Pyongyang de la bomba atómica? Algunos expertos consideran que tal vez la tiene; otros, que se trata simplemente de un farol.Los inspectores del Organismo Internacional de la Energía Atómica (OIEA) no pudieron llevar a cabo la inspección que les habría permitido determinar si las autoridades norcoreanas desviaron o no barras de combustible irradiado en 1989, durante una misteriosa parada del reactor de Yongbyon. "La opinión generalizada es que, en este caso, disponen de plutonio suficiente para fabricar dos bombas del tipo de la lanzada en Nagasaki", afirma un diplomático occidental. Es también la opinión de la Agencia de Defensa japonesa.

Otra pregunta es qué van a hacer las autoridades de Pyongyang con las 8.000 barras de combustible irradiado que mandaron retirar durante las últimas semanas de Yongbyon y que se encuentran ahora bajo vigilancia de las cámaras del OIEA en la misma central. Si Corea del Norte retirase el plutonio de estas barras, podría fabricar entre cuatro y seis bombas, estima la misma fuente.

Sin embargo, aunque disponga del plutonio suficiente, existen obstáculos técnicos muy complejos antes de llegar a fabricar una bomba que sea operativa, subrayan los especialistas. Este tipo de arma necesita, por ejemplo, un detonador muy perfeccionado que envuelve el plutonio y debe someterlo a una presión ingente en el momento de la explosión. "No sé si tienen la bomba, pero, aunque la tuvieran, probablemente se trataría de un arma muy difícil de transportar", asegura un experto.

Y añade: "Más bien tengo la impresión de que es un farol. En este caso, significa que los norcoreanos no quieren controles del OIEA para evitar que éste descubra que no tienen nada". Los que sostienen esta tesis añaden que Pyongyang aprovecha los interrogantes sobre su programa nuclear para conseguir concesiones de Estados Unidos.

Si se demostrara que no tiene la bomba, Kim II Sung perdería la única carta de la que dispone en su partida de póquer con el mundo exterior.