Concluye en Madrid la feria de los autores

La Feria del Libro de Madrid de 1994 ha sido, ante todo, la feria de los autores. Las ventas (836 millones de pesetas), los visitantes (unos 2.300.000) y los ejemplares vendidos (292.336) son similares a otras ediciones. Pero los autores han cumplido como nunca. Los escritores que más han vendido, Alfonso Ussía, Antonio Gala, José María Carrascal, Carmen Martín Gaite, Arturo Pérez Reverte o Federico Jiménez Losantos, han firmado, mañana y tarde, todos los fines de semana. Ante el éxito, Madrid tendrá desde este año una nueva Feria de Libro en otoño.

Para Jesús García Bayón, director de la Feria, el leve descenso en las ventas se debe a la caída de las compras de grandes obras. "Ha bajado mucho el libro de gran formato", asegura. "Cada año vienen más autores a firmar. Los lectores quieren charlar con ellos, conocerlos. También es verdad que el tiempo nos ha acompañado mucho", reconoce García Bayón para explicar que casi dos millones y medio de personas hayan pasado por el Parque del Retiro. durante las tres semanas que ha durado la Feria. El último sábado llegaron a firmar 210 autores a la vez.La lista de libros más vendidos facilitada por los organizadores está encabezada por Alfonso Ussía y su Tratado de buenas maneras (Planeta); el segundo es Antonio Gala con Andaluz (Espasa); el tercero es la edición de bolsillo del Diccionario de la Real Academia Española; el cuarto Los comentarios de José María Carrascal (Espasa) y el quinto la Breve historia de España, de Fernando García de Cortázar (Alianza).

El sexto lugar lo ocupa una obra que no contiene una sola palabra: El ojo mágico (Ediciones B), que muestra imágenes en tres dimensiones. Arturo Pérez Reverte está en séptimo lugar con Territorio comanche (Ollero); seguido de Gabriel García Márquez con Del amor y otros demonios (Mondadori); Fernando Vizcaíno Casas con España viva (Planeta) y Federico Jiménez Losantos con La última salida de Manuel Azaña (Planeta). Carmen Martín Gaite, con La Reina de las Nieves (Anagrama) y José Luis Sampedro con sus dos novelas de juventud, La sombra de los días y La estatua de Adolfo Espejo (Alfaguara) son los números once y doce de una lista en la que el ensayo ha primado sobre la literatura.

"En la tele no lleva bigote", decían dos jóvenes ante la caseta en la que Fernando Fernán Gómez firmaba, con mucha parsimonia, El ascensor de los borrachos. En esta feria literaria la imagen también ha mandado. Tanto Ussía como Pérez Reverte tenían grandes colas ante sus casetas. Tras una divertida regañina de Pérez Reverte, una joven, que le había pedido un libro para su padre, no tuvo más remedio que asegurar que se iba a leer El maestro de esgrima: "Este verano cae, de verdad". La conversación forma parte del rito.

Sin el apoyo de la pequeña pantalla, las firmas de Gala, Martín Gaite, Almudena Grandes, Luis Landero, Juan José Millás, Terenci Moix o Sampedro también han sido constantes. Y no sólo sus novedades, sino que venden mucho fondo. Algo que, según el editor Antonio Huerga (Libertarias), no es muy común. "Ha sido una feria de la vanidades. No ha habido compra de fondo, sólo de novedades. La verdad es que ha estado regular. Al final, nos han salvado a todos las firmas".