"Tengo simpatía por Argentaria"
Jesús Vera ha pasado casi 20 de sus 34 años en oficinas de Banesto. Los años transcurridos desde que entrase a trabajar en el banco en 1975 le han proporcionado casi todo Io que tiene: un puesto de oficial de primera en una pequeña oficina de Madrid; unas 530 acciones del banco, que han pasado de valer millón y medio en noviembre a sólo 430.000 pesetas ahora; y una deuda de dos millones con Banesto, el dinero que le prestaron para comprar las acciones."Fueron dos créditos de un millón cada uno, cuando las ampliaciones, en 1987 y 1989, creo". Vera no parece excesivamente abrumado por no estar devolviendo el préstamo. "No estoy pagando, y de momento no me han exigido nada".
"Tampoco me preocupa mucho", reflexiona, un tanto sorprendido de su falta de interés. En medio del maremágnum, lo último en lo que le da por pensar es en cómo devolver el crédito. Lo que le interesa ahora es el futuro de Banesto. Mantener un puesto de trabajo más o menos seguro.
Por eso estaba ayer en la junta. "Yo apoyo el plan de viabilidad, de lo contrario no hay alternativa". "Luego dependerá e quién venga", añade.
Y a continuación pone cara de intentar averiguar quién de todos, BBV, Santander, Argentaria, o quizás el Popular, será el elegido por el Banco de España para dirigir el reflotamiento de Banesto. ¿Alguna preferencia personal? "Tengo una clara simpatía por Argentaria", explica Vera, "porque es quien mejor garantiza los actuales puestos de trabajo de Banesto". Cuando as acciones han caído, se han perdido cientos de miles de pesetas, y el préstamo no se puede devolver, lo único que comienza a contar es el empleo.
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